Han matado la esperanza
Poema publicado el 09 de Abril de 2018
HAN MATADO LA ESPERANZA
Ha enmudecido la lira y el verbo se ha hecho silencio;
tengo el alma hecha jirones y mi corazón de duelo
por el tañer de campanas que están repicando a muerto.
Han matado la esperanza.
Han esquilmado mi patria, los que a servirla vinieron
se han hecho los propietarios, arrebatando los sueños
a multitud de sus hijos condenados al destierro,
porque la dejaron yerma sin ningún remordimiento.
Han matado la esperanza.
Y con su hatillo cargado de frustración y añoranzas,
no es diversión ni aventuras lo buscado en tierra extraña,
sino la supervivencia como en épocas pasadas.
Han matado la esperanza.
Y al pensar que los malvados que el desman han cometido
quedarán sin penitencia absueltos de su delito,
no quiero apelar al cielo poniéndole en compromiso.
Han matado la esperanza.
Que aunque es mandato divino el perdón, no la venganza,
yo no quiero resignarme y los condeno y maldigo,
que me duelen las entrañas de ver como se desangra
un pueblo que tuvo orgullo y es nuevamente cautivo.
Han matado la esperanza.
No presumo de profeta, pero haré esta profecía:
Enterrarán los derechos con dolosa hipocresía
si pronto la indiferencia no se torna en rebeldía.
Han matado la esperanza.
Quien quiera votar puede pulsar una estrella, la de la derecha es la máxima puntuación y la de la izquierda, la mínima. Le quedaré muy agradecido a quien lo haga. Muchas gracias.
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Poema publicado el 09 de Abril de 2018
HAN MATADO LA ESPERANZA
Ha enmudecido la lira y el verbo se ha hecho silencio;
tengo el alma hecha jirones y mi corazón de duelo
por el tañer de campanas que están repicando a muerto.
Han matado la esperanza.
Han esquilmado mi patria, los que a servirla vinieron
se han hecho los propietarios, arrebatando los sueños
a multitud de sus hijos condenados al destierro,
porque la dejaron yerma sin ningún remordimiento.
Han matado la esperanza.
Y con su hatillo cargado de frustración y añoranzas,
no es diversión ni aventuras lo buscado en tierra extraña,
sino la supervivencia como en épocas pasadas.
Han matado la esperanza.
Y al pensar que los malvados que el desman han cometido
quedarán sin penitencia absueltos de su delito,
no quiero apelar al cielo poniéndole en compromiso.
Han matado la esperanza.
Que aunque es mandato divino el perdón, no la venganza,
yo no quiero resignarme y los condeno y maldigo,
que me duelen las entrañas de ver como se desangra
un pueblo que tuvo orgullo y es nuevamente cautivo.
Han matado la esperanza.
No presumo de profeta, pero haré esta profecía:
Enterrarán los derechos con dolosa hipocresía
si pronto la indiferencia no se torna en rebeldía.
Han matado la esperanza.
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