Yo sigo allí
Poema publicado el 10 de Enero de 2019
YO SIGO ALLÍ
Espero tu regreso sentado frente al mar,
así como aquella tarde que un día te vi partir,
dijiste que me amabas y te pusiste a llorar,
yo sigo en esa espera en mi duro caminar.
Tantas veces por ti, el mar me ha preguntado,
le dije a partido buscando una ilusión,
pues se ha llevado mi corazón enamorado,
y espero su llegada con mucha emoción.
El mar está callado no sé si me responde,
si creé en tus palabras que un día me dijiste,
es muy tarde ya, que hasta la luna se esconde,
yo sigo allí sentado. donde un día me dejaste.
Muchas tardes el mar fue nuestro testigo,
aliado compañero de noches de pasión,
me mira y mis lágrimas me limpia como amigo,
él escucha mis palabras, también a mi oración.
Y allí sigo sentado esperando tu llegada,
te busco entre las olas, cada día, cada tarde,
a veces ya cansada mi alma enamorada,
me dice, agarra tu equipaje no seas tan cobarde.
No sé qué más decirle, si él sabe nuestra historia,
él sabe que te amo, con mucha devoción,
también me ha pedido que te saque de mi memoria,
pero luego le digo, yo no puedo ir contra mi corazón.
Yo sigo allí esperando cuidando tu regreso,
mi alma ya cansada me quiere abandonar,
yo sigo allí cada noche aguardando aquel beso,
recordando tus palabras, cuando te echaste a navegar..
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Poema publicado el 10 de Enero de 2019
YO SIGO ALLÍ
Espero tu regreso sentado frente al mar,
así como aquella tarde que un día te vi partir,
dijiste que me amabas y te pusiste a llorar,
yo sigo en esa espera en mi duro caminar.
Tantas veces por ti, el mar me ha preguntado,
le dije a partido buscando una ilusión,
pues se ha llevado mi corazón enamorado,
y espero su llegada con mucha emoción.
El mar está callado no sé si me responde,
si creé en tus palabras que un día me dijiste,
es muy tarde ya, que hasta la luna se esconde,
yo sigo allí sentado. donde un día me dejaste.
Muchas tardes el mar fue nuestro testigo,
aliado compañero de noches de pasión,
me mira y mis lágrimas me limpia como amigo,
él escucha mis palabras, también a mi oración.
Y allí sigo sentado esperando tu llegada,
te busco entre las olas, cada día, cada tarde,
a veces ya cansada mi alma enamorada,
me dice, agarra tu equipaje no seas tan cobarde.
No sé qué más decirle, si él sabe nuestra historia,
él sabe que te amo, con mucha devoción,
también me ha pedido que te saque de mi memoria,
pero luego le digo, yo no puedo ir contra mi corazón.
Yo sigo allí esperando cuidando tu regreso,
mi alma ya cansada me quiere abandonar,
yo sigo allí cada noche aguardando aquel beso,
recordando tus palabras, cuando te echaste a navegar..
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