La niña y la adulta
Poema publicado el 21 de Abril de 2014
Quien se gane la niña que hay en mí, se gana con ella mi corazón entero. Es inútil intentar conquistar a la adulta. Porque te hará caso omiso frecuente. Ya ella, crecida... Ha aprendido a desconfiar en numerosas situaciones... La niña aún mira al mundo con ojos de ilusión. La malicia común no la ataca aún. Por lo tanto confía en la naturaleza buena del ser humano. A esto, la adulta en ocasiones propicia proteger a la niña de peligros y la instruye en el arte de la desconfianza. La niña, con su usual inocencia, no pierde fe.
Me mirarás...
Conocerás a la adulta primero.
Ella es altiva.
Desconfiada. Y,
En ocasiones, una fiera temperamental.
La niña no la conocerás hasta un tiempo más.
Pero tendrás que enfrentarla a ella primero que todo.
Porque la niña es sensible...
Una extensión de su propia alma..
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Poema publicado el 21 de Abril de 2014
Quien se gane la niña que hay en mí, se gana con ella mi corazón entero. Es inútil intentar conquistar a la adulta. Porque te hará caso omiso frecuente. Ya ella, crecida... Ha aprendido a desconfiar en numerosas situaciones... La niña aún mira al mundo con ojos de ilusión. La malicia común no la ataca aún. Por lo tanto confía en la naturaleza buena del ser humano. A esto, la adulta en ocasiones propicia proteger a la niña de peligros y la instruye en el arte de la desconfianza. La niña, con su usual inocencia, no pierde fe.
Me mirarás...
Conocerás a la adulta primero.
Ella es altiva.
Desconfiada. Y,
En ocasiones, una fiera temperamental.
La niña no la conocerás hasta un tiempo más.
Pero tendrás que enfrentarla a ella primero que todo.
Porque la niña es sensible...
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