Recuerdos
Poema publicado el 20 de Enero de 2014
Pasa el manisero, con su ronca corneta.
El carro del lechero, con sus tachos plateados.
.
Los cansinos caballos, del carro del panadero.
Y los pavos que pasan, ocupando la veredas,
con su colgajos rojos, arriados por el pavero.
Las muñecas en los brazos de las niñas,
La pelota de trapo tras la que corren los chicos.
Figuritas con brillantes y las bolitas lecheras,
la mancha estatua y el patroncito de la vereda.
“Martín Pescador” ¿Me dejará pasar?
Y el arroz con leche me quiero casar…
Escarcha en los cordones de todas las veredas.
Cumpleaños con tortas, velas, chocolate...
Los circos que acampaban en los baldíos del barrio
y los gitanos con su música y sus carpas…
¿Adónde se fueron? ¡Se los llevó el progreso!
Cada tanto, cuando la nostalgia me invade,
abro despacio y con cuidado
el arcón de los recuerdos.
Ahí están ¡vívidos! y surgen los colores.
y se dispersan aquellos aromas:
la casa oliendo a sopa,
los fideos del domingo, la pizza de los sábados…
Los miércoles tres películas a precio de una..
Todos encerrados, aunque nunca olvidados,
están allí mis recuerdos
de un feliz e inolvidable pasado.
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Poema publicado el 20 de Enero de 2014
Pasa el manisero, con su ronca corneta.
El carro del lechero, con sus tachos plateados.
.
Los cansinos caballos, del carro del panadero.
Y los pavos que pasan, ocupando la veredas,
con su colgajos rojos, arriados por el pavero.
Las muñecas en los brazos de las niñas,
La pelota de trapo tras la que corren los chicos.
Figuritas con brillantes y las bolitas lecheras,
la mancha estatua y el patroncito de la vereda.
“Martín Pescador” ¿Me dejará pasar?
Y el arroz con leche me quiero casar…
Escarcha en los cordones de todas las veredas.
Cumpleaños con tortas, velas, chocolate...
Los circos que acampaban en los baldíos del barrio
y los gitanos con su música y sus carpas…
¿Adónde se fueron? ¡Se los llevó el progreso!
Cada tanto, cuando la nostalgia me invade,
abro despacio y con cuidado
el arcón de los recuerdos.
Ahí están ¡vívidos! y surgen los colores.
y se dispersan aquellos aromas:
la casa oliendo a sopa,
los fideos del domingo, la pizza de los sábados…
Los miércoles tres películas a precio de una..
Todos encerrados, aunque nunca olvidados,
están allí mis recuerdos
de un feliz e inolvidable pasado.
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