No soy yo quien te reclama
Poema publicado el 24 de Septiembre de 2010
No soy yo quien te reclama, no,
Ni siquiera lo pienses…
No seria digno…
No soy yo quien te reclama,
Si no mis manos que ya no te pueden acariciar,
Son mis pechos dolientes que necesitan tus atenciones,
Mi vientre desolado que está vacío.
No soy yo quien te reclama,
Es este corazón tonto que se ha quedado solo,
Es mi respiración que se ha detenido,
Son mis ojos que ya no distinguen los colores,
Es mi garganta desgastada de llorar.
No soy yo quien te reclama,
Son mis sueños convertidos en pesadillas,
Son mis horas eternas de angustia,
Son mis pies lastimados de tanto recorrer para encontrarte,
Es mi espalda que carga el peso de la amargura
No soy yo quien te reclama,
Son mis oídos que ya no escuchan tu voz,
Son mis pensamientos alegres que dieron paso a los tristes,
Son mis suspiros que no tienen dirección,
Es la melancolía que no puede escapar.
No soy yo quien te reclama,
Es mi piel carente de tus manos,
Es mi ser sediento de tu amor,
Es la luz de la luna que no puede bañar nuestros cuerpos,
Es el deseo de vivir que se ahoga…
No soy yo quien te reclama,
¡NO!.
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Poema publicado el 24 de Septiembre de 2010
No soy yo quien te reclama, no,
Ni siquiera lo pienses…
No seria digno…
No soy yo quien te reclama,
Si no mis manos que ya no te pueden acariciar,
Son mis pechos dolientes que necesitan tus atenciones,
Mi vientre desolado que está vacío.
No soy yo quien te reclama,
Es este corazón tonto que se ha quedado solo,
Es mi respiración que se ha detenido,
Son mis ojos que ya no distinguen los colores,
Es mi garganta desgastada de llorar.
No soy yo quien te reclama,
Son mis sueños convertidos en pesadillas,
Son mis horas eternas de angustia,
Son mis pies lastimados de tanto recorrer para encontrarte,
Es mi espalda que carga el peso de la amargura
No soy yo quien te reclama,
Son mis oídos que ya no escuchan tu voz,
Son mis pensamientos alegres que dieron paso a los tristes,
Son mis suspiros que no tienen dirección,
Es la melancolía que no puede escapar.
No soy yo quien te reclama,
Es mi piel carente de tus manos,
Es mi ser sediento de tu amor,
Es la luz de la luna que no puede bañar nuestros cuerpos,
Es el deseo de vivir que se ahoga…
No soy yo quien te reclama,
¡NO!.
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