Tú no estás
Poema publicado el 09 de Junio de 2019
Cada vez que me pregunto, se me olvida
Cada vez que me haces falta veo, no estás
Cada vez que te pinto en mi memoria apareces
y sin embargo cuando requiero de tu cuerpo
cuando necesito saciar un poco mis ganas
Viene la oscura noche, y me dice que no estás
y se hace tan pesado el día, como hasta el caminar
mientras tanto, pasan las horas, lo meses y días
al mirar al cielo, veo que como tú se aleja más
Y saltan de repente algunas lágrimas, esa poca agua
que tiende a desbordar el sentimiento humano
el amor, la pasión, los recuerdos y algo más
Cada vez que me pregunto, se me olvida
Cada vez que me haces falta veo, no estás
Cada vez que te pinto en mi memoria apareces
y sin embargo cuando requiero de tu cuerpo
ya, una vez a solas, hasta dejo de pensar
Me enamoré de ti, no como hombre, como un chiquillo,
como uno que jamás en la vida conoció el amor
y miré tus ojos, sin darme cuenta, esa fue mi perdición
Me enamoré de tus hombros, de tus labios
Me enamoré con esa enorme pasión, con hambre
con ganas de mirar y tenerte de noche y de día
y para colmo de un poeta, todo se desvaneció
Cuando se agotó la tinta, cuando se acabó el papel
Cuando necesito saciar un poco mis ganas
y Viene la oscura noche, me asoma que tú no estás
Samuel Akinin Levy
¿ Te gustó este poema? Compártelo:
Poema publicado el 09 de Junio de 2019
Cada vez que me pregunto, se me olvida
Cada vez que me haces falta veo, no estás
Cada vez que te pinto en mi memoria apareces
y sin embargo cuando requiero de tu cuerpo
cuando necesito saciar un poco mis ganas
Viene la oscura noche, y me dice que no estás
y se hace tan pesado el día, como hasta el caminar
mientras tanto, pasan las horas, lo meses y días
al mirar al cielo, veo que como tú se aleja más
Y saltan de repente algunas lágrimas, esa poca agua
que tiende a desbordar el sentimiento humano
el amor, la pasión, los recuerdos y algo más
Cada vez que me pregunto, se me olvida
Cada vez que me haces falta veo, no estás
Cada vez que te pinto en mi memoria apareces
y sin embargo cuando requiero de tu cuerpo
ya, una vez a solas, hasta dejo de pensar
Me enamoré de ti, no como hombre, como un chiquillo,
como uno que jamás en la vida conoció el amor
y miré tus ojos, sin darme cuenta, esa fue mi perdición
Me enamoré de tus hombros, de tus labios
Me enamoré con esa enorme pasión, con hambre
con ganas de mirar y tenerte de noche y de día
y para colmo de un poeta, todo se desvaneció
Cuando se agotó la tinta, cuando se acabó el papel
Cuando necesito saciar un poco mis ganas
y Viene la oscura noche, me asoma que tú no estás
Samuel Akinin Levy
¿ Te gustó este poema? Compártelo:
Compartiendo el poema con tus amigos en facebook ayudas a la difusión de estas bellas creaciones poéticas y ayudas a dar a conocer a los poetas.
