Mi hermosa jacqueline
Poema publicado el 17 de Abril de 2024
Eres luz que energía de amor destella, para dejar mi corazón marcado con tu profunda huella.
De tus ojos lindos emana tanta dulzura y la belleza más pura.
Tu sonrisa iluminó mi vida cuando ya la sentía triste y oscura.
Jacqueline, eres la delicia de una brisa matinal que ha inspirado mi alma a vivir y a soñar
Pronuncio tu nombre y descubro en él notas de una hermosa melodía que nunca se olvida.
Qué alegría siento al reencontrarnos en este maravilloso tiempo!.
Eres aquella flor que vi crecer dando fragancias a un jardín. Hoy mi amor por ti no tiene fin.
Hermosa Jacqueline, en mi alma enamorada estampada está tu huella, y yo feliz por tener el amor de la mujer más bella.
Yo por ti escribiría el poema y verso más hermoso, para llenarte de felicidad y alborozo.
Jacqueline, vives en mi, en cada amanecer y atardecer porque llevo impregnada tu fragancia de divina mujer.
Eres ese amor bonito que un día me hizo robar flores sin saber cómo haría para entregártelas. Aquella tarde, mi vida, yo sentía mi alma adolorida. Pero las flores llegaron a ti, y entonces me sentí muy feliz.
Derechos reservados.
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Poema publicado el 17 de Abril de 2024
Eres luz que energía de amor destella, para dejar mi corazón marcado con tu profunda huella.
De tus ojos lindos emana tanta dulzura y la belleza más pura.
Tu sonrisa iluminó mi vida cuando ya la sentía triste y oscura.
Jacqueline, eres la delicia de una brisa matinal que ha inspirado mi alma a vivir y a soñar
Pronuncio tu nombre y descubro en él notas de una hermosa melodía que nunca se olvida.
Qué alegría siento al reencontrarnos en este maravilloso tiempo!.
Eres aquella flor que vi crecer dando fragancias a un jardín. Hoy mi amor por ti no tiene fin.
Hermosa Jacqueline, en mi alma enamorada estampada está tu huella, y yo feliz por tener el amor de la mujer más bella.
Yo por ti escribiría el poema y verso más hermoso, para llenarte de felicidad y alborozo.
Jacqueline, vives en mi, en cada amanecer y atardecer porque llevo impregnada tu fragancia de divina mujer.
Eres ese amor bonito que un día me hizo robar flores sin saber cómo haría para entregártelas. Aquella tarde, mi vida, yo sentía mi alma adolorida. Pero las flores llegaron a ti, y entonces me sentí muy feliz.
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