A tomás.- (cabito).-
Poema publicado el 18 de Octubre de 2012
El mes pasado me trajeron un diario de Treinta y Tres
Allí en la portada estaba la foto del ya desaparecido “Cabito”
Hoy abro facebook y allí otra vez veo al inolvidable
“linyera” del pueblo con su bolsa al hombro
Y un poema que habla del desamor que lo acompaña en su andar
Un maremoto de pensamientos encontrados llenó mi alma
Recordé los días de mi adolescencia donde siempre
al pasar para el liceo esperaba ver a ese entrañable
personaje que deambulaba por la ciudad
agradeciendo lo recibido sin importar si era una moneda,
algo para comer, o simplemente un saludo
Como no creo en las casualidades sino en las causalidades y
porque sé que habrán otros que sigan
viviendo en las calles de mi pueblo
pero que nunca se le igualarán, le dedico este poema:
A ti Tomás que pocos conocían tu nombre
Barba blanca descuidada
Caminante de alpargatas
¿por dónde andarás silbando bajito?
Tal vez deliberando con San Pedro
sobre uno o dos deseos, “ni nada menos”
y si las matemáticas no te fallan,
no te olvides que “dos por tres llueve”
Abrígate el alma si salís a barrer el polvo de las estrellas
“Disimula cabito, disimula ”, y llena de mariposas aladas
de rayos de sol tu vieja bolsa
para que te acompañen en este viaje
entibiando tu corazón para que ya nunca más te toque el desamor
Y hasta que vuélvanos a toparnos en la próxima esquina
¡Qué buenos caminos acompañen tus días!
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Poema publicado el 18 de Octubre de 2012
El mes pasado me trajeron un diario de Treinta y Tres
Allí en la portada estaba la foto del ya desaparecido “Cabito”
Hoy abro facebook y allí otra vez veo al inolvidable
“linyera” del pueblo con su bolsa al hombro
Y un poema que habla del desamor que lo acompaña en su andar
Un maremoto de pensamientos encontrados llenó mi alma
Recordé los días de mi adolescencia donde siempre
al pasar para el liceo esperaba ver a ese entrañable
personaje que deambulaba por la ciudad
agradeciendo lo recibido sin importar si era una moneda,
algo para comer, o simplemente un saludo
Como no creo en las casualidades sino en las causalidades y
porque sé que habrán otros que sigan
viviendo en las calles de mi pueblo
pero que nunca se le igualarán, le dedico este poema:
A ti Tomás que pocos conocían tu nombre
Barba blanca descuidada
Caminante de alpargatas
¿por dónde andarás silbando bajito?
Tal vez deliberando con San Pedro
sobre uno o dos deseos, “ni nada menos”
y si las matemáticas no te fallan,
no te olvides que “dos por tres llueve”
Abrígate el alma si salís a barrer el polvo de las estrellas
“Disimula cabito, disimula ”, y llena de mariposas aladas
de rayos de sol tu vieja bolsa
para que te acompañen en este viaje
entibiando tu corazón para que ya nunca más te toque el desamor
Y hasta que vuélvanos a toparnos en la próxima esquina
¡Qué buenos caminos acompañen tus días!
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