El poeta escriba.-
Poema publicado el 17 de Septiembre de 2012
El escriba quería ser poeta
Asumió desde joven que perdía el tiempo
Escribiendo de economía en crisis, de leyes que no respetaban
De cartas que contaban vidas de gente común
El soñaba con la osadía de tocar las puertas de las letras
Convirtiéndolas en poemas
Que todos apreciaran la belleza
de las palabras antiguas que cosquilleaban en su lengua
Que las letras fueran hilos de oro, los versos diamantes
Un tesoro ¡la pagina entera!
El creía en un mundo de magia,
en la generosidad humana del hombre de bien
Nada sospechaba siquiera de los instintos cubiertos en llamas
Que arrastraban al ser hasta el confín de los infiernos
Ni de la muerte en vida cuando un amor se va
Un día el escriba se enamoró
Hizo de su amor una religión, venerando hasta su sombra
Pero el ciclo de la vida le mostro como nace y muere la flor
Descubrió la avaricia de los seres, el despecho, el desamor
Se volvió triste, rencoroso y perdió su don
¿Cómo iba el tiempo a borrar este amor
que destrozaba por completo su corazón?
Sus ojos opacaron su brillo, el rostro se endureció
Desdeñosas palabras de su boca salió
La belleza perdió su encanto
El amor se convirtió en traición
Silencio a su desazón…
El poeta dormita en el olvido mientras
el escriba copia una canción
¡Vaya uno a saber porque es la sinrazón del ser!
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Poema publicado el 17 de Septiembre de 2012
El escriba quería ser poeta
Asumió desde joven que perdía el tiempo
Escribiendo de economía en crisis, de leyes que no respetaban
De cartas que contaban vidas de gente común
El soñaba con la osadía de tocar las puertas de las letras
Convirtiéndolas en poemas
Que todos apreciaran la belleza
de las palabras antiguas que cosquilleaban en su lengua
Que las letras fueran hilos de oro, los versos diamantes
Un tesoro ¡la pagina entera!
El creía en un mundo de magia,
en la generosidad humana del hombre de bien
Nada sospechaba siquiera de los instintos cubiertos en llamas
Que arrastraban al ser hasta el confín de los infiernos
Ni de la muerte en vida cuando un amor se va
Un día el escriba se enamoró
Hizo de su amor una religión, venerando hasta su sombra
Pero el ciclo de la vida le mostro como nace y muere la flor
Descubrió la avaricia de los seres, el despecho, el desamor
Se volvió triste, rencoroso y perdió su don
¿Cómo iba el tiempo a borrar este amor
que destrozaba por completo su corazón?
Sus ojos opacaron su brillo, el rostro se endureció
Desdeñosas palabras de su boca salió
La belleza perdió su encanto
El amor se convirtió en traición
Silencio a su desazón…
El poeta dormita en el olvido mientras
el escriba copia una canción
¡Vaya uno a saber porque es la sinrazón del ser!
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