Segunda fila.-
Poema publicado el 08 de Enero de 2016
Existe la experiencia única que va más allá de las palabras, la del amor, que como toda historia tiene un principio y un final.-Preguntarás que quiero decir con este juego de palabras, pues bien, descubrí después de tanto tiempo que no es el amor que gira en torno a las personas si no que somos nosotros que giramos en torno a él.- Cuando era pequeña escuche la frase :”después de mi hijo, mi madre”.- Al entrar a casa espié a mi madre , ¿qué otra persona podría ocupar ese lugar tan importante? Sus manos suavemente acariciando mi frente, peinando mis cabellos, sus ojos irradiando luz con ese halo protector, que solo hasta hoy frente al espejo pude ver.- Prometí en mi ideal infantil que nunca jamás nadie ocuparía su lugar, ella siempre seria la que mis ojos buscarían, la que en primera fila sentaría, la que con orgullo su nombre diría.- Recuerdo que a pesar de que nadie reclamaba mi presencia de hija pródiga o anhelada, pienso que sería por el carácter que poco a poco formaba mi personalidad, mi devoción era de verdad genuina con ese ser amado.-Poco a poco fui olvidando esa frase escuchada, hasta que un día como capricho del destino en mi boca floreció.- Hoy soy la más amada, siendo llevada de la mano a la primera fila, unos ojos buscan amorosamente mi mirada de complacencia.- Son mis manos las que acarician, las que peinan, la de besos y abrazos poderosos.- Hoy siento que más adelante cuando el tiempo haya transcurrido, estoy segura , que sería feliz y estaría agradecida con la vida de pasar a la segunda fila.-
¿ Te gustó este poema? Compártelo:
Poema publicado el 08 de Enero de 2016
Existe la experiencia única que va más allá de las palabras, la del amor, que como toda historia tiene un principio y un final.-Preguntarás que quiero decir con este juego de palabras, pues bien, descubrí después de tanto tiempo que no es el amor que gira en torno a las personas si no que somos nosotros que giramos en torno a él.- Cuando era pequeña escuche la frase :”después de mi hijo, mi madre”.- Al entrar a casa espié a mi madre , ¿qué otra persona podría ocupar ese lugar tan importante? Sus manos suavemente acariciando mi frente, peinando mis cabellos, sus ojos irradiando luz con ese halo protector, que solo hasta hoy frente al espejo pude ver.- Prometí en mi ideal infantil que nunca jamás nadie ocuparía su lugar, ella siempre seria la que mis ojos buscarían, la que en primera fila sentaría, la que con orgullo su nombre diría.- Recuerdo que a pesar de que nadie reclamaba mi presencia de hija pródiga o anhelada, pienso que sería por el carácter que poco a poco formaba mi personalidad, mi devoción era de verdad genuina con ese ser amado.-Poco a poco fui olvidando esa frase escuchada, hasta que un día como capricho del destino en mi boca floreció.- Hoy soy la más amada, siendo llevada de la mano a la primera fila, unos ojos buscan amorosamente mi mirada de complacencia.- Son mis manos las que acarician, las que peinan, la de besos y abrazos poderosos.- Hoy siento que más adelante cuando el tiempo haya transcurrido, estoy segura , que sería feliz y estaría agradecida con la vida de pasar a la segunda fila.-
¿ Te gustó este poema? Compártelo:
Compartiendo el poema con tus amigos en facebook ayudas a la difusión de estas bellas creaciones poéticas y ayudas a dar a conocer a los poetas.