La boda
Poema publicado el 21 de Junio de 2013
LA BODA
Para qué les cuento el cuento, muy poco divulgaréles
Bendecidos los contrayentes gustosísimos salieron
A poco tropezó la novia y al piso todos cayeron
Novio incluido que ardiente estaba para ayudarles
Luego a la fiesta se ha dicho con orquestas y guitarras
Les dijeron que los padres debían bailar primeros
Y así lo hicieron ellos complacidos de ser consuegros
El turno luego pasó a los novios animados por la farra
De repente al subterfugio la gana nos puso en vereda
Entrando al coche adornado derechito al hotel caímos
Primero unas pocas palabras y luego al baño a ducharnos
Limpia el alma, limpio el corazón y el cuerpo listo a la veda
No sé si deba contarles lo que lueguito fue pasando
Todo el mundo ha de entenderlo o al menos ha de saberlo
Del placer al poco rato la barriga se fue llenando
Y luego de nueve meses la guagua estaba llorando
De ahí en adelante las cosas van complicándose
Es la vida de parejas que se casan siendo amadas
Ya sabemos de qué se trata y no falta recordarlas
Buen connubio es aquel que en las cobijas florece
GONZALO MERINO PEREZ,
Doctor en leyes, poeta, novelista,
De mi Poemario “Harapos y Viejas Cosas”,
Con un saludo.
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Poema publicado el 21 de Junio de 2013
LA BODA
Para qué les cuento el cuento, muy poco divulgaréles
Bendecidos los contrayentes gustosísimos salieron
A poco tropezó la novia y al piso todos cayeron
Novio incluido que ardiente estaba para ayudarles
Luego a la fiesta se ha dicho con orquestas y guitarras
Les dijeron que los padres debían bailar primeros
Y así lo hicieron ellos complacidos de ser consuegros
El turno luego pasó a los novios animados por la farra
De repente al subterfugio la gana nos puso en vereda
Entrando al coche adornado derechito al hotel caímos
Primero unas pocas palabras y luego al baño a ducharnos
Limpia el alma, limpio el corazón y el cuerpo listo a la veda
No sé si deba contarles lo que lueguito fue pasando
Todo el mundo ha de entenderlo o al menos ha de saberlo
Del placer al poco rato la barriga se fue llenando
Y luego de nueve meses la guagua estaba llorando
De ahí en adelante las cosas van complicándose
Es la vida de parejas que se casan siendo amadas
Ya sabemos de qué se trata y no falta recordarlas
Buen connubio es aquel que en las cobijas florece
GONZALO MERINO PEREZ,
Doctor en leyes, poeta, novelista,
De mi Poemario “Harapos y Viejas Cosas”,
Con un saludo.
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