Piernas evocases
Poema publicado el 30 de Junio de 2009
Al evocar el contorno pronunciado
De tus caderas curvilíneas
Al dactilar imaginario poco recatado
Sobre tus muslos perfectos
Con vellos someros
Erizan el pensamiento sin ideas
Gracia divina al ropaje vuestro
Por acariciar tu bello cuerpo
Atraes la envidia con siniestro
Escozor al entorno
Que te rodea
Con preámbulo sinuoso lento
Tiemblo al contemplarte
Indiscreto creo poder acariciarte
A metros solo vacilo al intento
Tener el valor de enfrentarte
Sin engaños solo ser sincero
Pero estrello ante tu sonrisa radiante
Y claudico solo al mirarte
Fuiste la inspiración de mis versos
Hoy vuelves a mi mente agradable
Al contemplarte como siempre
Lejana entre besos
Dados pocos respetables
Son el amanecer y fiambre
De cuanto hombre osa saludarte
Pero al evocarte en tu entrepierna
El estupor me hace sentir radiante
La respiración se me acelera
Cuando al sentirte cerca vacilante
Mis dedos rozan tu prenda
Siento tu calor sin tocarte
El sudor se apodera
De este espléndido instante
Pero el sonar del despertador
Aterra el final del sueño delirante
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Poema publicado el 30 de Junio de 2009
Al evocar el contorno pronunciado
De tus caderas curvilíneas
Al dactilar imaginario poco recatado
Sobre tus muslos perfectos
Con vellos someros
Erizan el pensamiento sin ideas
Gracia divina al ropaje vuestro
Por acariciar tu bello cuerpo
Atraes la envidia con siniestro
Escozor al entorno
Que te rodea
Con preámbulo sinuoso lento
Tiemblo al contemplarte
Indiscreto creo poder acariciarte
A metros solo vacilo al intento
Tener el valor de enfrentarte
Sin engaños solo ser sincero
Pero estrello ante tu sonrisa radiante
Y claudico solo al mirarte
Fuiste la inspiración de mis versos
Hoy vuelves a mi mente agradable
Al contemplarte como siempre
Lejana entre besos
Dados pocos respetables
Son el amanecer y fiambre
De cuanto hombre osa saludarte
Pero al evocarte en tu entrepierna
El estupor me hace sentir radiante
La respiración se me acelera
Cuando al sentirte cerca vacilante
Mis dedos rozan tu prenda
Siento tu calor sin tocarte
El sudor se apodera
De este espléndido instante
Pero el sonar del despertador
Aterra el final del sueño delirante
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