Tu amor y tu sombra
Poema publicado el 14 de Abril de 2010
Colgado en las ventanas de mis ojos.
No es bastante, afanarme tras de todas
las luminarias, para abrir, un poco,
la cerrada espesura de mis horas.
No me acostumbro. La guitarra muerta...:
los gritos silenciosos de las cosas...;
el cansancio que abruma mis nocturnos sueños
de manos hueras y mirada idiota.
Las huellas que dejaste, me persiguen,
ajenas a esta angustia carnihonda
que hiela, poco a poco, mis adentros.
Sin ti, no hay Dios, como sin Dios, no hay rosas,
como no hay luz sin sol, ni sol sin frío.
El cuerpo, es tan de barro, que me sobra.
Moribundo de ausencia, este aleteo,
quiere llenar el hueco que, en la aurora,
colmaba la canción de tu silencio.
No me acostumbro a amanecer, ahora,
amortajado en leves brumas malvas
- color de soledades dolorosas -.
Mi sangre, en sueños, busca los caminos
para inundar tu albura de amapolas
y al despertar, como una alondra herida,
llora por mi el rocío entre las hojas.
No me acostumbro, no. No me acostumbro,
a vivir con tu amor y con tu sombra.
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Poema publicado el 14 de Abril de 2010
Colgado en las ventanas de mis ojos.
No es bastante, afanarme tras de todas
las luminarias, para abrir, un poco,
la cerrada espesura de mis horas.
No me acostumbro. La guitarra muerta...:
los gritos silenciosos de las cosas...;
el cansancio que abruma mis nocturnos sueños
de manos hueras y mirada idiota.
Las huellas que dejaste, me persiguen,
ajenas a esta angustia carnihonda
que hiela, poco a poco, mis adentros.
Sin ti, no hay Dios, como sin Dios, no hay rosas,
como no hay luz sin sol, ni sol sin frío.
El cuerpo, es tan de barro, que me sobra.
Moribundo de ausencia, este aleteo,
quiere llenar el hueco que, en la aurora,
colmaba la canción de tu silencio.
No me acostumbro a amanecer, ahora,
amortajado en leves brumas malvas
- color de soledades dolorosas -.
Mi sangre, en sueños, busca los caminos
para inundar tu albura de amapolas
y al despertar, como una alondra herida,
llora por mi el rocío entre las hojas.
No me acostumbro, no. No me acostumbro,
a vivir con tu amor y con tu sombra.
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