Fe de erratas
Poema publicado el 02 de Septiembre de 2013
Fe de erratas 2001
¡Cada vez que te veo, sos una intriga para mí!
Sin embargo, no puedo ver más haya de esos ojos. De la sombra que atraviesa al mutismo de este otoño.
Trazo una bisectriz en la calle Alsina. Cuyo último punto desciende allí donde subsiste una comarca envuelta en un clima de aire viscoso. ¡Es que vos estás allí bajo fondo! Derramando sueños por el piso. Sobre las miserias de quienes no sueñan más que con ellos, porque te hipotecan el deseo con el discurso de alto vuelo... ¡y esos perritos por qué les dejan sus regalos!
El roce aproximado de las hojas te reintegran al vientre matinal. Una jerga natural que te despierta el ojo en una atmósfera que huele a Don Jon, y al Club de París.
A todas esas respiraciones mervalizadas.
La claridad de la mañana avanza sobre un baldosón de carne y hueso,
y ahí sigues rehén de la canción del transeúnte. O de la mufa de algún zapato, y de ese zumbido metropolitano.
Y aquí en otro día están ustedes.
Aquí estás vos.
En esta fe de erratas.
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Poema publicado el 02 de Septiembre de 2013
Fe de erratas 2001
¡Cada vez que te veo, sos una intriga para mí!
Sin embargo, no puedo ver más haya de esos ojos. De la sombra que atraviesa al mutismo de este otoño.
Trazo una bisectriz en la calle Alsina. Cuyo último punto desciende allí donde subsiste una comarca envuelta en un clima de aire viscoso. ¡Es que vos estás allí bajo fondo! Derramando sueños por el piso. Sobre las miserias de quienes no sueñan más que con ellos, porque te hipotecan el deseo con el discurso de alto vuelo... ¡y esos perritos por qué les dejan sus regalos!
El roce aproximado de las hojas te reintegran al vientre matinal. Una jerga natural que te despierta el ojo en una atmósfera que huele a Don Jon, y al Club de París.
A todas esas respiraciones mervalizadas.
La claridad de la mañana avanza sobre un baldosón de carne y hueso,
y ahí sigues rehén de la canción del transeúnte. O de la mufa de algún zapato, y de ese zumbido metropolitano.
Y aquí en otro día están ustedes.
Aquí estás vos.
En esta fe de erratas.
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