Quieres saber quien me quiere mas.
Poema publicado el 17 de Julio de 2013
El día de hoy fue para mí, el mismo que el día de ayer,
Me preguntaste la misma pregunta una y otra vez,
Que si quería transitar por los salones de la plasticidad,
Por las líneas esbeltas y bellas de tu comentada figura,
Y siempre te contesto lo de siempre, que no ya.
Vuelves a preguntar que si te recuerdo en algo,
Que si todavía algún sentimiento guardo por ti,
O si tal vez te quiera ir a ver, para tu voz sentir,
Y te respondo lo mismo, que se lo que quieres,
Se de tus falsas insinuaciones y falta de sensibilidad,
Por esa razón, no me fio de tus dadivas vacías,
Y siempre te respondo lo mismo, que no molestes mas.
Es que no te cansas, me temo que alguien te manipula,
Pues no puede ser que preguntes lo mismo a diario,
Que si me gusta alguna comida, que si voy a caminar,
O que fue lo que soñé el día antes, y que color me gusta más,
Y te respondo lo mismo, que no me interesan tus mentiras,
Ni tus conflictos y enredos, que ya no te quiero ver más.
Ayer me preguntaste otra vez que si te quería visitar,
Para hablar de las estrellas, del amor a las flores exoticas,
De los atardeceres, de los placeres de la vida actual,
Y de lo mucho que te gustaría hablar de mi futuro,
Conocer de mi pasado tempestuoso en otras tierras,
Y te respondo que lo mejor es que te vayas a bailar.
Es tanta tu insistencia, que creo ya lo tuyo no es normal,
No entiendes que no te quiero, que por ti ya no siento más,
Es algo obsesivo tu forma de actuar, todos los días lo mismo,
Pon límites a tus palabras, dejame al menos respirar,
Y disfrutar solo de la luz de la mañana, de la brisa al mediodía,
Y poder por las noches las estrellas una a una poder contar.
En realidad ya no te quiero, te veo como una desconocida más,
Sabes me traicionaste y mi corazón por ti ha dejado de palpitar,
Así que no malgastes argucias para que vuelva a regresar,
Pues mi vida le pertenece a otra mujer, que si me quiere en verdad, La causante de mis desvelos, la dueña de mi corazón en el frio, El amor que calmo mi pesar, la que me cuido de no caer en el olvido, Ella es a quien más quiero y quien entre lagrimas si me supo amar.
Autor: Jorge Serra Colina.
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Poema publicado el 17 de Julio de 2013
El día de hoy fue para mí, el mismo que el día de ayer,
Me preguntaste la misma pregunta una y otra vez,
Que si quería transitar por los salones de la plasticidad,
Por las líneas esbeltas y bellas de tu comentada figura,
Y siempre te contesto lo de siempre, que no ya.
Vuelves a preguntar que si te recuerdo en algo,
Que si todavía algún sentimiento guardo por ti,
O si tal vez te quiera ir a ver, para tu voz sentir,
Y te respondo lo mismo, que se lo que quieres,
Se de tus falsas insinuaciones y falta de sensibilidad,
Por esa razón, no me fio de tus dadivas vacías,
Y siempre te respondo lo mismo, que no molestes mas.
Es que no te cansas, me temo que alguien te manipula,
Pues no puede ser que preguntes lo mismo a diario,
Que si me gusta alguna comida, que si voy a caminar,
O que fue lo que soñé el día antes, y que color me gusta más,
Y te respondo lo mismo, que no me interesan tus mentiras,
Ni tus conflictos y enredos, que ya no te quiero ver más.
Ayer me preguntaste otra vez que si te quería visitar,
Para hablar de las estrellas, del amor a las flores exoticas,
De los atardeceres, de los placeres de la vida actual,
Y de lo mucho que te gustaría hablar de mi futuro,
Conocer de mi pasado tempestuoso en otras tierras,
Y te respondo que lo mejor es que te vayas a bailar.
Es tanta tu insistencia, que creo ya lo tuyo no es normal,
No entiendes que no te quiero, que por ti ya no siento más,
Es algo obsesivo tu forma de actuar, todos los días lo mismo,
Pon límites a tus palabras, dejame al menos respirar,
Y disfrutar solo de la luz de la mañana, de la brisa al mediodía,
Y poder por las noches las estrellas una a una poder contar.
En realidad ya no te quiero, te veo como una desconocida más,
Sabes me traicionaste y mi corazón por ti ha dejado de palpitar,
Así que no malgastes argucias para que vuelva a regresar,
Pues mi vida le pertenece a otra mujer, que si me quiere en verdad, La causante de mis desvelos, la dueña de mi corazón en el frio, El amor que calmo mi pesar, la que me cuido de no caer en el olvido, Ella es a quien más quiero y quien entre lagrimas si me supo amar.
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