Poema publicado el 10 de Noviembre de 2008
Ayer estaba mi amor
como aquella nube blanca
que va tan sola en el cielo
y tan alta,
como aquella
que ahora pasa
junto a la luna
de plata.
Nube
blanca,
que vas tan sola en el cielo
y tan alta,
junto a la luna
de plata,
vendrás a parar
mañana,
igual que mi amor,
en agua,
en agua del mar
amarga.
Mi amor tiene el ritornelo
del agua, que, sin cesar,
en nubes sube hasta el cielo
y en lluvia baja hasta el mar.
El agua, aquel ritornelo,
de mi amor, que, sin cesar,
en sueños sube hasta el cielo
y en llanto baja hasta el mar.
DIÁLOGO PERDIDO
(Entre Don Quijote y Sancho)
-Todos andan buscando, Sancho, una paloma por el mundo y nadie la encuentra.
-Pero , que paloma es la que buscan?
-Es una paloma blanca que lleva en el pico el ultimo rayo amoroso de luz que queda ya sobre la tierra.
-Como la golondrina de Tristán.
-Eso, como la golondrina de Tristán. Bien te acuerdas, Sancho.
Aquel cabello dorado de Isolda que dejo caer la golondrina sobre el hombro cansado del Rey era el rayo de amor que andaba buscando el hombre sobre la tierra,
pero no es esto...
hay otra definición;
te lo explicaré mejor:
esa paloma que andan buscando
es aquella que una vez se le posó en la cabeza
a un pobre Nazareno en el Jordán;
aquello sí fue un buen juego de prestidigitación:
un hombre sencillo entra a bañarse en el Jordán.
se le posa una paloma blanca sobre la cabeza
y sale de las aguas
convertido en el hijo de la Luz
en el hijo de Dios
en el hijo del Hombre
Y aquel juego se hizo sin trucos y sin trampas
por eso fue un gran milagro.
¡El Gran Milagro del Mundo!
Desde entonces
el hombre vale más...
Y desde entonces todos andan buscando esa paloma
para que se haga otra vez el Milagro...
¡Y el Hombre valga mas!
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