Otra vez tú
Poema publicado el 22 de Octubre de 2009
Otra vez que la madrugada me encontró pensando en ti,
y soñando despierto he dicho tu nombre.
Otra vez que la luna no me adormece con su suave canto
y que tu voz llega cual dulce melodía a mi vida.
Otra vez que no pude reposar mis ojos,
pues la imagen de tu rostro nunca se apartó de mí.
Otra vez que mi deseo se quemó en mi piel
y las caricias ausentes de tus manos perforaron mi alma.
Otra vez que el tiempo huyó de mí,
pues la noche me pareció un minuto;
talvez fueron pocos segundos de tu recuerdo,
pero me bastó para no morir de sed.
Talvez no seas tú quien está en mi cama ahora,
pero esta noche no logras apartarte de mí.
Y quizá nunca encuentre respuesta a esta vida;
pero tú seguirás siendo siempre la pregunta.
Y quizá ya nunca serás tú;
y quizá yo nunca lo desee así;
Y talvez no seas tú:
pero esta noche estás aquí a mi lado...
Otra vez me enamoré de ti,
aunque yo sé que tú ni me recuerdas.
Otra vez me volví loco con tu memoria
y tú sigues aquí sin notarlo...
Otra vez que deseo que sea ayer:
para que tú nunca llegues a mi vida;
o quizá desee que sigas siendo la misma,
pero que nunca llegues a ser hoy.
Otra vez que no me entiendo,
Pues te pienso y no puedo tenerte,
¡aún no me entiendo!!
eres tú, y no quiero que seas tú,
te he buscado y no logro encontrarte,
y estás aquí a mi lado, mas nunca volverás
¡no... aún no me entiendo!!
Otra vez que no deseo que llegue el día
pues no podré disfrutar de tu presencia;
otra vez que te irás como vampiro de mi cabeza
y llegarás a ser tú nuevamente...
...Tú, la que ya no me amas, aunque sigues aquí;
la que no recuerda lo que un día fuimos;
la que con un suspiro me desprecia;
la que con un beso me odia desde siempre.
estuardo.mendoza@hotmail.com, viernes 21 de diciembre de 2007. 5:50
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Poema publicado el 22 de Octubre de 2009
Otra vez que la madrugada me encontró pensando en ti,
y soñando despierto he dicho tu nombre.
Otra vez que la luna no me adormece con su suave canto
y que tu voz llega cual dulce melodía a mi vida.
Otra vez que no pude reposar mis ojos,
pues la imagen de tu rostro nunca se apartó de mí.
Otra vez que mi deseo se quemó en mi piel
y las caricias ausentes de tus manos perforaron mi alma.
Otra vez que el tiempo huyó de mí,
pues la noche me pareció un minuto;
talvez fueron pocos segundos de tu recuerdo,
pero me bastó para no morir de sed.
Talvez no seas tú quien está en mi cama ahora,
pero esta noche no logras apartarte de mí.
Y quizá nunca encuentre respuesta a esta vida;
pero tú seguirás siendo siempre la pregunta.
Y quizá ya nunca serás tú;
y quizá yo nunca lo desee así;
Y talvez no seas tú:
pero esta noche estás aquí a mi lado...
Otra vez me enamoré de ti,
aunque yo sé que tú ni me recuerdas.
Otra vez me volví loco con tu memoria
y tú sigues aquí sin notarlo...
Otra vez que deseo que sea ayer:
para que tú nunca llegues a mi vida;
o quizá desee que sigas siendo la misma,
pero que nunca llegues a ser hoy.
Otra vez que no me entiendo,
Pues te pienso y no puedo tenerte,
¡aún no me entiendo!!
eres tú, y no quiero que seas tú,
te he buscado y no logro encontrarte,
y estás aquí a mi lado, mas nunca volverás
¡no... aún no me entiendo!!
Otra vez que no deseo que llegue el día
pues no podré disfrutar de tu presencia;
otra vez que te irás como vampiro de mi cabeza
y llegarás a ser tú nuevamente...
...Tú, la que ya no me amas, aunque sigues aquí;
la que no recuerda lo que un día fuimos;
la que con un suspiro me desprecia;
la que con un beso me odia desde siempre.
estuardo.mendoza@hotmail.com, viernes 21 de diciembre de 2007. 5:50
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