Poema publicado el 10 de Noviembre de 2008
Como al fondo del mar baja
el buzo en busca de perlas,
la inspiraci贸n baja a veces
al fondo de mis tristezas
para recoger estrofas
empapadas con mis penas.
Y en cada uno de mis versos
viven, con vida siniestra,
mis deseos, mis temores,
mis dudas y mis creencias
隆Qu茅 mucho que yo los ame!
隆Qu茅 mucho que yo los lea,
si son hojas arrancadas
al libro de mi existencia!
Cuando en mi oscura memoria
la frase brillando queda,
como en un jir贸n de nube
el reflejo de una estrella,
es porque baj贸 tan hondo
la inspiraci贸n a cogerla,
que en esa frase palpita
el coraz贸n del poeta.
Siempre que a so帽ar me pongo
encantadoras quimeras,
imposibles ideales,
seres de extra帽a belleza
que habitan en luminosas
arquitecturas a茅reas;
formas que flotan aisladas
y di谩fanas, y serenas,
como los 谩ngeles blancos
de la Divina Comedia,
la realidad de la vida,
inflexible, me despierta,
y quedo confuso y triste
sintiendo angustias supremas,
como esas aves que huyen
en busca de primavera
y en alta mar las sorprende
el furor de la tormenta.
Entonces escribo, escribo
con una ternura inmensa,
que s贸lo cuando hago versos
el alma llora y se queja,
y la inspiraci贸n se hunde
en el mar de las tristezas
para recoger estrofas
empapadas en mis penas.
Y sin embargo, en el fondo,
Cu谩ntos dolores se quedan
sin expresi贸n, tan intensos
que no caben en la idea,
porque son, deseos vagos,
aspiraciones inmensas,
alas que exploran espacios,
sue帽os de cosas eternas,
nostalgias de extra帽os mundos,
citas de lo que no llega...
La inspiraci贸n es un buzo
que no ha pescado esas perlas.
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