Estímulo y sinergia
Poema publicado el 12 de Octubre de 2023
"Resulta útil el destello: indicios de su cavilación se esparcieron al día siguiente
igual que escarcha."
John Ashbery
El contraste de algún modo
Define la especie del contraste. Como
Tirar o empujar, como llenar una botella
O vaciarla, ver
Una moneda en el fondo de un estanque
O pensar en el metal y en la alianza de las formas.
Como borrar una línea o escribir su tiempo.
Como mirar por la ventana y ver una ciudad
O bajar la persiana y empezar a recordarla.
Un autillo en invierno
No es necesariamente más misterioso
Por estar dentro de un poema. Ni es más bello
Un sauce en un cuadro de Renoir
Que si lo tengo delante de mis ojos.
En sociedades sin orden
La imaginación consiste
En un producto inocuo con el que representar el mundo.
Acariciar objetos y palabras
De la misma manera en que un sociólogo
Observa fenómenos y los recoge en un texto
Que no invita al deleite, pero incendia
El pensamiento como núcleo de la acción.
Y, además, conseguir no ser aburrido
Ni pesimista.
(La canción de David Bowie
Que sonaba mientras hablaba con aquella chica en el Shout
Era “Rebel Rebel”
Y formaba parte de una residual, casi apagada
Sinergia con la conversación, con sus aristas
Relativamente estéticas,
Con sus pequeños ángulos fugaces. Y sucede así
Probablemente
Para seguir charlando de cosas mundanas y agradables;
Una conversación práctica. Y el azar de volver a ese garito
Pero esta vez con una inercia bien distinta,
Que en realidad ya no era inercia
Al cambiar la manera de intuir los aciertos
O la épica de la velocidad,
Lo mismo que una planta silvestre cuando llega la primavera
Y destruye todo el invierno).
Todo se compensa
Con factores de comodidad y práctica;
Hay muchos otros temas
De Bowie que me gustan, pero “Rebel Rebel”
Pasa a ser un paradigma. Por decirlo algo más claro,
Si hubiese sonado el tema ”After All” o “Cygnet Committee”,
Estoy seguro de que no hubiéramos sonreído demasiado.
Pero maldita sea, ya sabemos
Cómo está el patio o la fábula
Nocturna del demonio.
Cohesión de música y costumbre, articulada
Apariencia, señal fiable sobre manos
Que van dibujando el símbolo y su efecto
Para hacerse respetar bajo el fenómeno
Y sentir la lealtad de los contrastes.
En aquella cafetería, sin ir más lejos,
El pincho de tortilla está mostrando
Que procede de un universo visual (además de la metafísica
Irónica de monopolios gastronómicos);
Enfatiza y corrobora
Que el huevo —casi crudo— es la gracia que incluye a la patata
Y no al revés.
Al echar un poco de azúcar
En el café, es el café
Lo que genera la dulzura.
Cuando escucho una conversación
De manera involuntaria
Son ellos (los que están hablando) quienes escuchan mi silencio.
Si escribo sobre una rosa
La rosa está escribiendo sobre mi poder de escritura.
Si me pongo el forro polar
Mi alma se desnuda para comprender todo el frío.
¿Cómo seguir
Sobre las islas de ese tipo de pensamiento?
Me cuesta hacerlo, o no. Es manso el papel
Y además los signos no se agotan
Ni se rebelan contra la inercia de la mentira.
La obstinación de una ciencia sin prerrogativas
O el reverso de la mecánica
Pueden dar lugar a interpretaciones erróneas, y eso
Quizá sea lo más divertido de la contemplación
Sin tregua y sin lectores.
“Para muchos pueblos, el nombre es parte
De la cosa. Los esquimales, escribe Frazer,
Obtenían
Un nuevo nombre cuando llegaban a la vejez;
Los celtas
Consideran el nombre como sinónimo del alma y del aliento;
Entre los yuinos de Nueva Gales del Sur, el padre
Revelaba su nombre a su hijo en el momento de la iniciación
Y pocas personas más lo conocían.
En el Génesis
Se dice que Adán puso nombre a todas las cosas.
Y en el Apocalipsis, que Dios entregaría a los justos
Una piedrecita blanca con su verdadero nombre.
Los dogon, en el colmo del asombro y de la metáfora,
Consideran que la palabra es parte del semen de la divinidad.”
La expresión del alma desordena el tiempo y cede
A la naturaleza
Oblicua de la propia expresión. Necesitamos
Esa piedrecita blanca, y olvidando
La Creación o el fuego. Después acaso formar parte
De la memoria y su estructura. Después
El mar, los círculos del agua,
La belleza de todas las especies
De la tierra.
Dice un filósofo moderno
Que el lenguaje nos instruye sobre el modo de ver la realidad,
No sobre la realidad en sí, por eso es más de fiar
Cuando habla de fenómenos subjetivos
Que cuando habla de realidades objetivas.
El caso del sol es paradigmático. No podemos
Dejar de ver que se mueve en el cielo, pero la ciencia nos dice
Que eso no es verdad.
Tal vez no es verdad, pero lo veo.
Y hablando del cielo, cuando David Gilmour compuso el tema “Echoes”
La historia de la música
Se detuvo en un punto del planeta
Y sintetizó una llanura líquida
Con gritos de colores.
Es decir, representamos
En función de nuestra fe en el mundo,
Pero el mundo solo es una flor ardiendo
Dentro de un poema,
Y la historia el mapa de sus ecos.
(de "Interminables", inédito, escrito en 2023)
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Poema publicado el 12 de Octubre de 2023
"Resulta útil el destello: indicios de su cavilación se esparcieron al día siguiente
igual que escarcha."
John Ashbery
El contraste de algún modo
Define la especie del contraste. Como
Tirar o empujar, como llenar una botella
O vaciarla, ver
Una moneda en el fondo de un estanque
O pensar en el metal y en la alianza de las formas.
Como borrar una línea o escribir su tiempo.
Como mirar por la ventana y ver una ciudad
O bajar la persiana y empezar a recordarla.
Un autillo en invierno
No es necesariamente más misterioso
Por estar dentro de un poema. Ni es más bello
Un sauce en un cuadro de Renoir
Que si lo tengo delante de mis ojos.
En sociedades sin orden
La imaginación consiste
En un producto inocuo con el que representar el mundo.
Acariciar objetos y palabras
De la misma manera en que un sociólogo
Observa fenómenos y los recoge en un texto
Que no invita al deleite, pero incendia
El pensamiento como núcleo de la acción.
Y, además, conseguir no ser aburrido
Ni pesimista.
(La canción de David Bowie
Que sonaba mientras hablaba con aquella chica en el Shout
Era “Rebel Rebel”
Y formaba parte de una residual, casi apagada
Sinergia con la conversación, con sus aristas
Relativamente estéticas,
Con sus pequeños ángulos fugaces. Y sucede así
Probablemente
Para seguir charlando de cosas mundanas y agradables;
Una conversación práctica. Y el azar de volver a ese garito
Pero esta vez con una inercia bien distinta,
Que en realidad ya no era inercia
Al cambiar la manera de intuir los aciertos
O la épica de la velocidad,
Lo mismo que una planta silvestre cuando llega la primavera
Y destruye todo el invierno).
Todo se compensa
Con factores de comodidad y práctica;
Hay muchos otros temas
De Bowie que me gustan, pero “Rebel Rebel”
Pasa a ser un paradigma. Por decirlo algo más claro,
Si hubiese sonado el tema ”After All” o “Cygnet Committee”,
Estoy seguro de que no hubiéramos sonreído demasiado.
Pero maldita sea, ya sabemos
Cómo está el patio o la fábula
Nocturna del demonio.
Cohesión de música y costumbre, articulada
Apariencia, señal fiable sobre manos
Que van dibujando el símbolo y su efecto
Para hacerse respetar bajo el fenómeno
Y sentir la lealtad de los contrastes.
En aquella cafetería, sin ir más lejos,
El pincho de tortilla está mostrando
Que procede de un universo visual (además de la metafísica
Irónica de monopolios gastronómicos);
Enfatiza y corrobora
Que el huevo —casi crudo— es la gracia que incluye a la patata
Y no al revés.
Al echar un poco de azúcar
En el café, es el café
Lo que genera la dulzura.
Cuando escucho una conversación
De manera involuntaria
Son ellos (los que están hablando) quienes escuchan mi silencio.
Si escribo sobre una rosa
La rosa está escribiendo sobre mi poder de escritura.
Si me pongo el forro polar
Mi alma se desnuda para comprender todo el frío.
¿Cómo seguir
Sobre las islas de ese tipo de pensamiento?
Me cuesta hacerlo, o no. Es manso el papel
Y además los signos no se agotan
Ni se rebelan contra la inercia de la mentira.
La obstinación de una ciencia sin prerrogativas
O el reverso de la mecánica
Pueden dar lugar a interpretaciones erróneas, y eso
Quizá sea lo más divertido de la contemplación
Sin tregua y sin lectores.
“Para muchos pueblos, el nombre es parte
De la cosa. Los esquimales, escribe Frazer,
Obtenían
Un nuevo nombre cuando llegaban a la vejez;
Los celtas
Consideran el nombre como sinónimo del alma y del aliento;
Entre los yuinos de Nueva Gales del Sur, el padre
Revelaba su nombre a su hijo en el momento de la iniciación
Y pocas personas más lo conocían.
En el Génesis
Se dice que Adán puso nombre a todas las cosas.
Y en el Apocalipsis, que Dios entregaría a los justos
Una piedrecita blanca con su verdadero nombre.
Los dogon, en el colmo del asombro y de la metáfora,
Consideran que la palabra es parte del semen de la divinidad.”
La expresión del alma desordena el tiempo y cede
A la naturaleza
Oblicua de la propia expresión. Necesitamos
Esa piedrecita blanca, y olvidando
La Creación o el fuego. Después acaso formar parte
De la memoria y su estructura. Después
El mar, los círculos del agua,
La belleza de todas las especies
De la tierra.
Dice un filósofo moderno
Que el lenguaje nos instruye sobre el modo de ver la realidad,
No sobre la realidad en sí, por eso es más de fiar
Cuando habla de fenómenos subjetivos
Que cuando habla de realidades objetivas.
El caso del sol es paradigmático. No podemos
Dejar de ver que se mueve en el cielo, pero la ciencia nos dice
Que eso no es verdad.
Tal vez no es verdad, pero lo veo.
Y hablando del cielo, cuando David Gilmour compuso el tema “Echoes”
La historia de la música
Se detuvo en un punto del planeta
Y sintetizó una llanura líquida
Con gritos de colores.
Es decir, representamos
En función de nuestra fe en el mundo,
Pero el mundo solo es una flor ardiendo
Dentro de un poema,
Y la historia el mapa de sus ecos.
(de "Interminables", inédito, escrito en 2023)
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