Clamor
Poema publicado el 09 de Julio de 2011
Dantesco, moribundo, insondable corazón,
Muestras cruelmente congojas inmemoriales
Verdades o mentiras
Escondidas debajo de los muros,
Debajo de las rocas,
Debajo del crepúsculo de tus pueblos
Sumidos en la hipocresía, abandono y la miseria
Quejidos llegan a través de la lluvia,
Tus lágrimas muertas son mis ríos,
Somos iguales,
¡Me duele la existencia!.
A veces es mejor el confinamiento,
Pero el masoquismo es mi placer
Y me entrego al desconsuelo
Universo inclemente,
Habla, muestra tus costuras,
Averno, puñales en el centro de brotes,
Enmudecidos días
Noches tibias, relatos trasegados
Oscuridad tejida de música que trata de engañar la edad,
Pero tu estás allí
Imperiosa,
Hablando tonterías,
Riéndote vadear inadvertida,
Lo cual es imposible,
La realidad
Te muestra sus brutales colmillos
Como lobos hambrientos de carne fresca,
De carne inocente, de carne olvidada, fría
¿Somos acaso pecadores?,
La tierra abre sus fauces y nos traga el destino,
Nos envía profetas de mentira
Que endulzan los festejos con bambalinas negras
¿Somos acaso pecadores?,
Amor hechizo efímero
Embrutecido mundo
Desquiciadas bestias
Que oprimen y fomentan la amarilla idiotez
¡Ya basta vida! Perdona nuestros pecados
Y tráenos el preludio sin fin
De noches y días que no predecimos
¡Ya basta vida regrésanos la alegría,
Permite que mis brazos se alarguen
Y lleguen a tus ojos,
A tu vientre de arroz y vino.
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Poema publicado el 09 de Julio de 2011
Dantesco, moribundo, insondable corazón,
Muestras cruelmente congojas inmemoriales
Verdades o mentiras
Escondidas debajo de los muros,
Debajo de las rocas,
Debajo del crepúsculo de tus pueblos
Sumidos en la hipocresía, abandono y la miseria
Quejidos llegan a través de la lluvia,
Tus lágrimas muertas son mis ríos,
Somos iguales,
¡Me duele la existencia!.
A veces es mejor el confinamiento,
Pero el masoquismo es mi placer
Y me entrego al desconsuelo
Universo inclemente,
Habla, muestra tus costuras,
Averno, puñales en el centro de brotes,
Enmudecidos días
Noches tibias, relatos trasegados
Oscuridad tejida de música que trata de engañar la edad,
Pero tu estás allí
Imperiosa,
Hablando tonterías,
Riéndote vadear inadvertida,
Lo cual es imposible,
La realidad
Te muestra sus brutales colmillos
Como lobos hambrientos de carne fresca,
De carne inocente, de carne olvidada, fría
¿Somos acaso pecadores?,
La tierra abre sus fauces y nos traga el destino,
Nos envía profetas de mentira
Que endulzan los festejos con bambalinas negras
¿Somos acaso pecadores?,
Amor hechizo efímero
Embrutecido mundo
Desquiciadas bestias
Que oprimen y fomentan la amarilla idiotez
¡Ya basta vida! Perdona nuestros pecados
Y tráenos el preludio sin fin
De noches y días que no predecimos
¡Ya basta vida regrésanos la alegría,
Permite que mis brazos se alarguen
Y lleguen a tus ojos,
A tu vientre de arroz y vino.
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