Hablarte al oído
Poema publicado el 20 de Diciembre de 2012
Pasa la gente y sigo sin mirar,
El frío y el aire siguen sin parar;
Llevo conmigo una gran sensación,
Es algo que no tiene explicación…
Imagino que estoy a tu lado,
En pleno viento tú y yo abrazados;
Hablándote al oído de mi sentir,
Llevando tu mano a mi latir…
El sonido del camión me despierta,
Veo mi sudadera, está abierta;
De repente te veo en la otra calle,
No quiero que mi corazón estalle…
No tienes idea de cuánto te quiero,
Ni tampoco de que mi amor es sincero;
Iré hasta a ti y te diré al oído,
Que este día me flechó Cupido…
Es más fácil decirlo más no puedo,
Te veo con alguien y me quedo;
Inmóvil y apenado así lo sentí,
Será algo complicado llegar a ti…
Me siento en la banqueta helada,
¡No, ya me ensucié el pantalón!,
Regreso a tu ubicación y mi mirada,
No pudo concebir ese resbalón…
Te reíste de mi caída chistosa,
Te acercaste con una bufanda rosa;
¿Estás bien?, eso me preguntaste,
Dentro de mí, ¿Porqué te acercaste?...
Era la primera vez cerca de tu ser,
Me paré y no sabía qué hacer;
Los latidos casi sacan a mi corazón,
Lo bueno que tengo buen caparazón…
Tomé el control de la situación,
No importó si iba con discreción,
Dije: ¡Hace tiempo que te he querido!,
Y no pude evitar hablarte al oído…
¿ Te gustó este poema? Compártelo:
Poema publicado el 20 de Diciembre de 2012
Pasa la gente y sigo sin mirar,
El frío y el aire siguen sin parar;
Llevo conmigo una gran sensación,
Es algo que no tiene explicación…
Imagino que estoy a tu lado,
En pleno viento tú y yo abrazados;
Hablándote al oído de mi sentir,
Llevando tu mano a mi latir…
El sonido del camión me despierta,
Veo mi sudadera, está abierta;
De repente te veo en la otra calle,
No quiero que mi corazón estalle…
No tienes idea de cuánto te quiero,
Ni tampoco de que mi amor es sincero;
Iré hasta a ti y te diré al oído,
Que este día me flechó Cupido…
Es más fácil decirlo más no puedo,
Te veo con alguien y me quedo;
Inmóvil y apenado así lo sentí,
Será algo complicado llegar a ti…
Me siento en la banqueta helada,
¡No, ya me ensucié el pantalón!,
Regreso a tu ubicación y mi mirada,
No pudo concebir ese resbalón…
Te reíste de mi caída chistosa,
Te acercaste con una bufanda rosa;
¿Estás bien?, eso me preguntaste,
Dentro de mí, ¿Porqué te acercaste?...
Era la primera vez cerca de tu ser,
Me paré y no sabía qué hacer;
Los latidos casi sacan a mi corazón,
Lo bueno que tengo buen caparazón…
Tomé el control de la situación,
No importó si iba con discreción,
Dije: ¡Hace tiempo que te he querido!,
Y no pude evitar hablarte al oído…
¿ Te gustó este poema? Compártelo:
Compartiendo el poema con tus amigos en facebook ayudas a la difusión de estas bellas creaciones poéticas y ayudas a dar a conocer a los poetas.