Fuiste todo
Poema publicado el 22 de Septiembre de 2025
Y deje de lado mi corazón, para darle paso a mi razón, porque si bien me mueve el sentimiento, debía alejarme de las ganas de tanto amor.
Y tuve que amarrar mis emociones alborotados que gritaban tu nombre sin control, y correr fuerte por las sombras del desamor.
Y de tanto esperar mirando el cielo, me quedé perpleja por el silencio de tu voz. Y aunque mi alma susurraba mil te quieros, mi cabeza solo sentía desazón.
Y es que un día quisiste darte por vencido, mientras yo te esperaba en las tinieblas de nuestro nido. Porque testaruda seguí esperando tu amor en deshielo, y me dijiste un día que te disté por vencido en tus noches de desvelo.
Y por mi parte cerré la puerta con desenfreno, mutilando cada rincón que un día sintió amor. Porque comprendí por fin que ya estaba muerto cada destello de pasión en nuestros rincones predilectos, porque una vez más llore con frustración por amarte y cada noche derrote mis ganas de buscarte.
Y es que no quiero sentir tanta nostalgia, porque en mis venas brotan lágrimas y se nota aún tu ausencia. Porque lo fuiste todo y a la vez nada, porque fuiste día, noche y madrugada, porque fuiste fugaz y a la vez te desvaneciste en el eclipse de mis pupilas, fuiste infinito y a la vez te perdiste en el silencio de mis gritos. Fuiste tanto pero te sentiste tan poco, porque te entregue todo y jamás lo viste con tus ojos. Fuiste abrigo en las noches, y yo fui quien cuido tus sueños mientras dormías. Fuiste todo y a la vez nada, te entregue todo y tú me dejaste desangrada.
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Poema publicado el 22 de Septiembre de 2025
Y deje de lado mi corazón, para darle paso a mi razón, porque si bien me mueve el sentimiento, debía alejarme de las ganas de tanto amor.
Y tuve que amarrar mis emociones alborotados que gritaban tu nombre sin control, y correr fuerte por las sombras del desamor.
Y de tanto esperar mirando el cielo, me quedé perpleja por el silencio de tu voz. Y aunque mi alma susurraba mil te quieros, mi cabeza solo sentía desazón.
Y es que un día quisiste darte por vencido, mientras yo te esperaba en las tinieblas de nuestro nido. Porque testaruda seguí esperando tu amor en deshielo, y me dijiste un día que te disté por vencido en tus noches de desvelo.
Y por mi parte cerré la puerta con desenfreno, mutilando cada rincón que un día sintió amor. Porque comprendí por fin que ya estaba muerto cada destello de pasión en nuestros rincones predilectos, porque una vez más llore con frustración por amarte y cada noche derrote mis ganas de buscarte.
Y es que no quiero sentir tanta nostalgia, porque en mis venas brotan lágrimas y se nota aún tu ausencia. Porque lo fuiste todo y a la vez nada, porque fuiste día, noche y madrugada, porque fuiste fugaz y a la vez te desvaneciste en el eclipse de mis pupilas, fuiste infinito y a la vez te perdiste en el silencio de mis gritos. Fuiste tanto pero te sentiste tan poco, porque te entregue todo y jamás lo viste con tus ojos. Fuiste abrigo en las noches, y yo fui quien cuido tus sueños mientras dormías. Fuiste todo y a la vez nada, te entregue todo y tú me dejaste desangrada.
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