De listones, espirales y resacas
Poema publicado el 01 de Febrero de 2010
Resignarme a los listones, misión completa
resignarme a los nuevos encuentros, sin problema
resignarme a los hechos, más fácil que otras cosas
resignarme a los espirales... todavía no puedo
Y si hablara de nuevas visiones, mentiría
no tengo más que la nostalgia y el aburrimiento
y tengo la desdicha de querer salvarme en cosas
(y con cosas) que no son mías
ya que no me pertenecen
Tal vez, todavía tú, signifiques el Abaddón
y aún, cuando el etanol me rige en las venas
y me perfuma en mi aliento
pienso que el Abaddón es el rescate
Ya cuando la resaca congestiona mi cabeza
y mis cuerdas vocales rugen
entiendo, de nuevo, lo que el abismo comprende
quizás, no me resigno, y no lo logro
sólo porque me gusta la dolencia y la ficción
de mi utopía contigo
Puedo glorificarme en masivos labios
acariciar mil rostros, copular a la par
ser dado de elogios, y no
no puedo alcanzar tu angustia
la negación toma mi manos
y las usa para palpar tu lejanía
Quiero sólo saber cómo enrredarme en tu maraña
quisiera, sabiéndolo imposible, colarme contigo en la noche
conspirar contra la invisibilidad
aquella que por causa y efecto nos amordaza
Quiero, turbio, un poco de tu resequedad al beso
Hablo de nosotros, como si de verdad lo hubiera
y tan sólo pido tu entendimiento
para no arrastrarme en la desdicha de nuevo
Mas he entendido, en un cavernoso placer
que la piel no es suficiente
mas no he entendido, en tu cratérico placer
que la piel no es suficiente
Lo que he entendido, perfectamente
analizando cuando no podía yo
que con más piel en mi piel
con más labios en mis labios
con más manos en mis manos
y abrazos en mis afectos
es que la soledad no significa solitario
pero tú, tú y tú, significan mi soledad.
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Poema publicado el 01 de Febrero de 2010
Resignarme a los listones, misión completa
resignarme a los nuevos encuentros, sin problema
resignarme a los hechos, más fácil que otras cosas
resignarme a los espirales... todavía no puedo
Y si hablara de nuevas visiones, mentiría
no tengo más que la nostalgia y el aburrimiento
y tengo la desdicha de querer salvarme en cosas
(y con cosas) que no son mías
ya que no me pertenecen
Tal vez, todavía tú, signifiques el Abaddón
y aún, cuando el etanol me rige en las venas
y me perfuma en mi aliento
pienso que el Abaddón es el rescate
Ya cuando la resaca congestiona mi cabeza
y mis cuerdas vocales rugen
entiendo, de nuevo, lo que el abismo comprende
quizás, no me resigno, y no lo logro
sólo porque me gusta la dolencia y la ficción
de mi utopía contigo
Puedo glorificarme en masivos labios
acariciar mil rostros, copular a la par
ser dado de elogios, y no
no puedo alcanzar tu angustia
la negación toma mi manos
y las usa para palpar tu lejanía
Quiero sólo saber cómo enrredarme en tu maraña
quisiera, sabiéndolo imposible, colarme contigo en la noche
conspirar contra la invisibilidad
aquella que por causa y efecto nos amordaza
Quiero, turbio, un poco de tu resequedad al beso
Hablo de nosotros, como si de verdad lo hubiera
y tan sólo pido tu entendimiento
para no arrastrarme en la desdicha de nuevo
Mas he entendido, en un cavernoso placer
que la piel no es suficiente
mas no he entendido, en tu cratérico placer
que la piel no es suficiente
Lo que he entendido, perfectamente
analizando cuando no podía yo
que con más piel en mi piel
con más labios en mis labios
con más manos en mis manos
y abrazos en mis afectos
es que la soledad no significa solitario
pero tú, tú y tú, significan mi soledad.
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