Donde la luz ya no llega
Poema publicado el 04 de Mayo de 2025
Fuiste mi agua, mi luz, mi aliento,
el fulgor que habitaba mi sombra.
Yo, errante, quebrado en el viento,
te ofrecí un amor que aún se nombra.
No supe cuidar tu presencia sagrada,
ni leí en tus ojos la despedida.
Perdí tu alma cuando era mi morada,
y quedó en mí la mitad de mi vida.
Me curé con el filo del tiempo,
renací entre escombros callados.
Ahora soy paz que se forja lento,
aunque mis pasos estén marcados.
Tú ya no estás? y sin embargo,
cada día es un altar de tu ausencia.
Te honro sin rogar el milagro,
te amo desde mi nueva conciencia.
No pido retorno, ni perdón, ni consuelo,
solo dejo que el viento me enseñe a volar.
Porque a veces, perder lo que fue nuestro cielo
es la forma más pura? de comenzar a amar.
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Poema publicado el 04 de Mayo de 2025
Fuiste mi agua, mi luz, mi aliento,
el fulgor que habitaba mi sombra.
Yo, errante, quebrado en el viento,
te ofrecí un amor que aún se nombra.
No supe cuidar tu presencia sagrada,
ni leí en tus ojos la despedida.
Perdí tu alma cuando era mi morada,
y quedó en mí la mitad de mi vida.
Me curé con el filo del tiempo,
renací entre escombros callados.
Ahora soy paz que se forja lento,
aunque mis pasos estén marcados.
Tú ya no estás? y sin embargo,
cada día es un altar de tu ausencia.
Te honro sin rogar el milagro,
te amo desde mi nueva conciencia.
No pido retorno, ni perdón, ni consuelo,
solo dejo que el viento me enseñe a volar.
Porque a veces, perder lo que fue nuestro cielo
es la forma más pura? de comenzar a amar.
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