Gracia soñada
Poema publicado el 09 de Octubre de 2010
GRACIA SOÑADA
¡Oh, de “Las mil y una noches” mi Amada…!
Mí eternamente y siempre soñada…
Tus sueños son lluvia perfumada
en mi abrileña madrugada.
¡Amada…! Encantado rocío de mi Alma,
deja que tu sutil lluvia caiga
en las secas grietas del Alma
y besando los pétalos rojos de mi sangre,
florezcan el árido desierto
del huerto de mi corazón…
Y mira por favor en el camino
el trébol que sembramos juntos,
que sabe de la presencia del niño
que de tu mano ríe, salta y corre
desde el día aquel… que tengo tu cariño.
¡Oh, ven mi Amada…!
Tengo el mágico cetro del Hada.
Volemos los dos en la posibilidad
de esta rosada alegría soñada.
6
Pondremos mágicas alas blancas a la realidad
mas allá del sol
y del horizonte que besa el girasol…
Junto al Poniente
donde la luz se sonrosa dulcemente,
allá donde claridades resbalan
cual cascada de agua…
allí colgaremos nuestro nido Celeste,
lo alumbraremos con Luceros del Alba…
y del Divino Cielo… haremos nuestra casa.
¡Oh, ven mi Amada…!
De “Las mil y una noches” siempre soñada…
La esperanza es una piedra encantada
en el mágico cetro… que me diera tu Hada.
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Poema publicado el 09 de Octubre de 2010
GRACIA SOÑADA
¡Oh, de “Las mil y una noches” mi Amada…!
Mí eternamente y siempre soñada…
Tus sueños son lluvia perfumada
en mi abrileña madrugada.
¡Amada…! Encantado rocío de mi Alma,
deja que tu sutil lluvia caiga
en las secas grietas del Alma
y besando los pétalos rojos de mi sangre,
florezcan el árido desierto
del huerto de mi corazón…
Y mira por favor en el camino
el trébol que sembramos juntos,
que sabe de la presencia del niño
que de tu mano ríe, salta y corre
desde el día aquel… que tengo tu cariño.
¡Oh, ven mi Amada…!
Tengo el mágico cetro del Hada.
Volemos los dos en la posibilidad
de esta rosada alegría soñada.
6
Pondremos mágicas alas blancas a la realidad
mas allá del sol
y del horizonte que besa el girasol…
Junto al Poniente
donde la luz se sonrosa dulcemente,
allá donde claridades resbalan
cual cascada de agua…
allí colgaremos nuestro nido Celeste,
lo alumbraremos con Luceros del Alba…
y del Divino Cielo… haremos nuestra casa.
¡Oh, ven mi Amada…!
De “Las mil y una noches” siempre soñada…
La esperanza es una piedra encantada
en el mágico cetro… que me diera tu Hada.
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