Las flores blancas
Poema publicado el 15 de Enero de 2013
LAS FLORES BLANCAS
Una mañana temprano
sudoroso me desperté,
no sabía la causa ni el por qué,
me sentía con hambre,
con ganas de llorar y no pude.
En mi cabeza no queda agua
ni para el llanto, aunque la pida
mi tristeza, con sequedad de labios
o por lo que mi cuerpo quiera.
Cuando me siento triste,
siento en mi alma tristeza
y me encamino por los polvorientos
caminos de tierras secas.
Los árboles se agitan a mi paso,
sus frondosas ramas en suelo tocan
y parece que se van a desprender,
y al rato se marcha el viento
y las ramas se han quedado solas,
sin la música del aire, o del viento,
el que se lleva las hojas secas.
La primavera se acerca,
y con sus perfume a rosas
se irá la tristeza, los llantos
y miles de cosas nuevas,
y cuando quede limpio el suelo
de hojas secas , habrá arrastrado,
entre ellas, mis llantos y tristezas.
LAS FLORES BLANCAS
Una mañana temprano
sudoroso me desperté,
no sabía la causa ni el por qué,
me sentía con hambre,
con ganas de llorar y no pude.
En mi cabeza no queda agua
ni para el llanto, aunque la pida
mi tristeza, con sequedad de labios
o por lo que mi cuerpo quiera.
Cuando me siento triste,
siento en mi alma tristeza
y me encamino por los polvorientos
caminos de tierras secas.
Los árboles se agitan a mi paso,
sus frondosas ramas en suelo tocan
y parece que se van a desprender,
y al rato se marcha el viento
y las ramas se han quedado solas,
sin la música del aire, o del viento,
el que se lleva las hojas secas.
La primavera se acerca,
y con sus perfume a rosas
se irá la tristeza, los llantos
y miles de cosas nuevas,
y cuando quede limpio el suelo
de hojas secas , habrá arrastrado,
entre ellas, mis llantos y tristezas.
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Poema publicado el 15 de Enero de 2013
LAS FLORES BLANCAS
Una mañana temprano
sudoroso me desperté,
no sabía la causa ni el por qué,
me sentía con hambre,
con ganas de llorar y no pude.
En mi cabeza no queda agua
ni para el llanto, aunque la pida
mi tristeza, con sequedad de labios
o por lo que mi cuerpo quiera.
Cuando me siento triste,
siento en mi alma tristeza
y me encamino por los polvorientos
caminos de tierras secas.
Los árboles se agitan a mi paso,
sus frondosas ramas en suelo tocan
y parece que se van a desprender,
y al rato se marcha el viento
y las ramas se han quedado solas,
sin la música del aire, o del viento,
el que se lleva las hojas secas.
La primavera se acerca,
y con sus perfume a rosas
se irá la tristeza, los llantos
y miles de cosas nuevas,
y cuando quede limpio el suelo
de hojas secas , habrá arrastrado,
entre ellas, mis llantos y tristezas.
LAS FLORES BLANCAS
Una mañana temprano
sudoroso me desperté,
no sabía la causa ni el por qué,
me sentía con hambre,
con ganas de llorar y no pude.
En mi cabeza no queda agua
ni para el llanto, aunque la pida
mi tristeza, con sequedad de labios
o por lo que mi cuerpo quiera.
Cuando me siento triste,
siento en mi alma tristeza
y me encamino por los polvorientos
caminos de tierras secas.
Los árboles se agitan a mi paso,
sus frondosas ramas en suelo tocan
y parece que se van a desprender,
y al rato se marcha el viento
y las ramas se han quedado solas,
sin la música del aire, o del viento,
el que se lleva las hojas secas.
La primavera se acerca,
y con sus perfume a rosas
se irá la tristeza, los llantos
y miles de cosas nuevas,
y cuando quede limpio el suelo
de hojas secas , habrá arrastrado,
entre ellas, mis llantos y tristezas.
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