Quisiera contarte
Poema publicado el 15 de Mayo de 2012
QUISIERA CONTARTE
Deja que me explaye en mi amarga escritura que no quede una duda de lo que quiero contarte, decirte bajo el escondite de mi pluma que te llamo mi amor, que soñando contigo se me escapa un cariño mío y que lo sufro con dolor, fuerte mi alma parece, pero como el cristal, frágil llega a ser, la vida se me escapa con tu recuerdo pues me agobia ese momento que no estoy ni dentro ni fuera de el.
Sueño durante el día como sería mi vida contigo, lloro las noches por estar sin ti, grave condena que llevo conmigo, merecido lo tengo por lo que perdí, quisiera volver a nacer, para volver a encontrarte, poder enmendar mis errores vividos y así lograr decirte lo que tengo prohibido.
Quisiera que me leyeras, que lograras entender mi queja, que me quisieras solo por una vez pues tu alma a la mía se asemeja, quiero tu hombro prestado llorar hasta el amanecer y dormirme cansado y agotado en el, necesito de tu mano la caricia recuerdo de tu juventud, de aquel roce sin malicia que añoro en su plenitud.
Dichosos los ojos que velan tu figura, odio que no sean los míos, pues serían de ti tan píos que fueran su mayor ventura, pudiera extender lo escrito pudiera decir cuanto te necesito, volar de mi mente su locura de la cual ya no participo, sería de eterna crueldad activar este principio que fuera mi vanidad colgada como un ripio.
No se lo digas a nadie, será como si para ti solo fuera, pongamos que te amo pongamos que de mi eres ajena, pero por favor no me alejes de tu lado, déjame que te quiera.
Eduardo Muñoz Portella
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Poema publicado el 15 de Mayo de 2012
QUISIERA CONTARTE
Deja que me explaye en mi amarga escritura que no quede una duda de lo que quiero contarte, decirte bajo el escondite de mi pluma que te llamo mi amor, que soñando contigo se me escapa un cariño mío y que lo sufro con dolor, fuerte mi alma parece, pero como el cristal, frágil llega a ser, la vida se me escapa con tu recuerdo pues me agobia ese momento que no estoy ni dentro ni fuera de el.
Sueño durante el día como sería mi vida contigo, lloro las noches por estar sin ti, grave condena que llevo conmigo, merecido lo tengo por lo que perdí, quisiera volver a nacer, para volver a encontrarte, poder enmendar mis errores vividos y así lograr decirte lo que tengo prohibido.
Quisiera que me leyeras, que lograras entender mi queja, que me quisieras solo por una vez pues tu alma a la mía se asemeja, quiero tu hombro prestado llorar hasta el amanecer y dormirme cansado y agotado en el, necesito de tu mano la caricia recuerdo de tu juventud, de aquel roce sin malicia que añoro en su plenitud.
Dichosos los ojos que velan tu figura, odio que no sean los míos, pues serían de ti tan píos que fueran su mayor ventura, pudiera extender lo escrito pudiera decir cuanto te necesito, volar de mi mente su locura de la cual ya no participo, sería de eterna crueldad activar este principio que fuera mi vanidad colgada como un ripio.
No se lo digas a nadie, será como si para ti solo fuera, pongamos que te amo pongamos que de mi eres ajena, pero por favor no me alejes de tu lado, déjame que te quiera.
Eduardo Muñoz Portella
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