Flechas en el corazón
Poema publicado el 15 de Agosto de 2016
Y me miraste aquella tarde, y
tu mirar lleno de vida mi existir.
Y en la luz de tus ojos me perdí,
pues la luz de tu alma lleno
aquel inmenso instante de amor…
Tus labios, como coral de rosas
y dalias, llevaron a mi boca
a la dulce tentación de robarte
un beso… y no supe que decir,
y me quede (de tu imagen) preso.
He pasado toda la noche
como las últimas noches de mi vida,
sin poder dormir, sin poder dejar
ni un instante de pensar en ti.
Me ha colmado la ansiedad
de volverte a ver, porque sigo con
los labios resecos, soñando con
beber del manantial de tus besos.
Me ha colmado la ansiedad
de volverte a ver, porque sigo
con el pecho abierto, soñando
con amarte aunque sea por un instante.
Enredada mi ilusión, casi marchitada,
en las largas horas que no pasan,
horas en que se acrecientan mis ansias.
Mi corazón roído por las horas
aguarda impaciente para verte y
decirte un montón de cosas…
y en el silencio de las horas solo
resuenan los suspiros de mi corazón.
Quizás pienses que estoy loco,
quizás tengas razón, pero desde
que te vi me enamoré de vos…
es que sos como el mismo amor
cuyas flechas se clavan muy
adentro del corazón.
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Poema publicado el 15 de Agosto de 2016
Y me miraste aquella tarde, y
tu mirar lleno de vida mi existir.
Y en la luz de tus ojos me perdí,
pues la luz de tu alma lleno
aquel inmenso instante de amor…
Tus labios, como coral de rosas
y dalias, llevaron a mi boca
a la dulce tentación de robarte
un beso… y no supe que decir,
y me quede (de tu imagen) preso.
He pasado toda la noche
como las últimas noches de mi vida,
sin poder dormir, sin poder dejar
ni un instante de pensar en ti.
Me ha colmado la ansiedad
de volverte a ver, porque sigo con
los labios resecos, soñando con
beber del manantial de tus besos.
Me ha colmado la ansiedad
de volverte a ver, porque sigo
con el pecho abierto, soñando
con amarte aunque sea por un instante.
Enredada mi ilusión, casi marchitada,
en las largas horas que no pasan,
horas en que se acrecientan mis ansias.
Mi corazón roído por las horas
aguarda impaciente para verte y
decirte un montón de cosas…
y en el silencio de las horas solo
resuenan los suspiros de mi corazón.
Quizás pienses que estoy loco,
quizás tengas razón, pero desde
que te vi me enamoré de vos…
es que sos como el mismo amor
cuyas flechas se clavan muy
adentro del corazón.
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