1 votos
2 visitas/día
127 dias online

Platonico - Poemas de J.e Layton



Poemas » j e layton » platonico




Categoría: Poemas de Amor
Platonico
Poema publicado el 30 de Diciembre de 2023

Igual que un bello jardín lleno de toda su hermosura en cada color de sus flores y pétalos,
Engalanas todo cuando pasas y despliegas toda tu hermosura en tan bellos colores,
Pues son ellas que por fortuna se parecen a ti, a tu belleza, con toda su dulce fragancia,
Así eres tú, que pasas y dejas la huella taciturna del encanto que te acompaña día a día.

Espero cada día el momento, ese pequeño instante en el que te veo desfilar por la calle,
Ese instante en el que un saludo lo llena todo ante mis ojos, ese hola casi imperceptible,
Ese hola que llega suave a mis oídos y se acuna fielmente en mi corazón, y soy feliz,
Siento que lo llenas todo cuanto soy, cuanto existo y cuanto vivo en ese instante de ti.

me aferro a dicho momento para grabar tu sonrisa en mi mente y en mis anhelos,
para no dejar ir la inspiración con la que pasas y arrasas todo lo malo, todo lo triste y el dolor.
Entonces grabo tu color, grabo tu sonrisa, el tono de tu voz y el encanto que despliegas a tu paso,
la inspiración que te acompaña se detiene frente a mí y hace pausa en tu recuerdo.

Inspiración que nace en ti, y entonces sucede que se queda quieta, dulce y tierna,
Y luego se convierte en letras y palabras para ti, para esta hoja en la que te relato.
Es tan dulce cerrar mis ojos y recordarte al pasar, recordar ese segundo de tu presencia fugaz,
Del maravilloso momento que es esperar atento a tu saludar, a tus ojos puestos en mí.

Entonces me doy cuenta que por un segundo existo en la misma existencia de mi vida y la tuya,
Llenando de alegrías, sonrisas y esperanza, aferrado para no claudicar en tu recuerdo,
En la relatividad del tiempo, yo trato de hacer eterno el momento en el que pasas y te vas,
Eterno en el recuerdo, en los anhelos y deseos de ti, de una historia… de un amor.

Luego llega el momento en el que me entrego plenamente a los pensamientos de ti,
Volando y soñando en esa historia inexistente, desconocida, con el hilo rojo desamparado,
Lo que pasa es que yo pierdo la cabeza cuando te veo, y entonces la realidad desaparece,
Para que mis deseos, mi imaginación y los latidos de mi corazón tomen el control.

Y sin saberlo, transformas mis días, mis instantes en los que me deleitas con tu presencia,
Alegrando mi día, alegrándome la vida, llevándote con tu ausencia las tristezas y el dolor,
Pero yo estoy aquí afuera y tu adentro, afuera de ti y tu adentro de mis pensamientos,
De mis deseos y anhelos, simplemente existiendo y viviendo, ese es el motivo de mi admiración.

Existiendo en este mundo cada vez más caótico, pero viviendo para hacerlo más dulce,
Tu; con tu presencia, con tu encanto, con tu belleza, con tu sonrisa y todo tu ser,
Para que todo se vea bonito y colorido para que la fragancia de las flores,
Arrope los días grises y tu presencia siga iluminando todo de olor, color y esperanza.

Ahora la realidad golpea fuerte estas palabras, esta inspiración y cada deseo y anhelo de ti,
Al imaginar que no debes caminar sola, que alguien agarra tu mano ahora mismo y te acompaña,
El afortunado hombre no debe sentir preocupación, pues no hay competencia que tenga la dicha,
De merecer caminar junto a ti, despertar junto a ti, andar de tu mano, respirar tu aire,

Vivir y morir en tu mirada, disfrutar tu piel, existir en tu sonrisa y probar la dulzura de tu alma,
De tu corazón y el deleite del néctar de tu amor, quien pudiera… como el, poseer tanta fortuna,
Yo solo puedo disfrutar de ti en un segundo de tu paso frente a mí, suficiente para escribirte,
Suficiente para inspirarme y afortunado de ver nacer en mi en el momento justo de tu presencia.

Estas palabras que hoy aquí tatuó para ti, no solo en esta hoja sino en mis ilusiones.
Y en la realidad en la que existo en ti y para ti y en la que ya eres dueña de mi deseo,
De mis sueños y mis anhelos de ti, ¡recuérdalo! de tu hermosa presencia y de la magia
que irradias en todo tu ser, ese encanto que rodea tu belleza, tu cuerpo y todo cuanto eres.

Le pido al cielo el milagro de poder no solo escribirte estas palabras,
Porque ya soy afortunado al hacerlo, sino de poder decírtelas de mi voz a tu oído,
Deleitarme en tu mirada y tu sonrisa mientras una a una se engalanan con tu presencia,
Así como las rosas al jardín, tú a mi vida.


¿ Te gustó este poema? Compártelo:
Compartiendo el poema con tus amigos en facebook ayudas a la difusión de estas bellas creaciones poéticas y ayudas a dar a conocer a los poetas.




 Compartir
Redes sociales
Facebook Twitter Google Bookmark MySpace Fresqui Meneame