0 votos
1 visitas/día
5227 dias online

El nombre divino del amor (continuación.) - Poemas de Jorge Lemoine Y Bosshardt



Poemas » jorge lemoine y bosshardt » el nombre divino del amor (continuacion )




Categoría: Poemas de Amor
El nombre divino del amor (continuación.)
Poema publicado el 02 de Noviembre de 2009

MUJER FUNDAMENTAL

Mujer fundamental, veta de gacelas
mina donde surge la mañana
guitarra genital del alba
telar profundo de la primavera
Mujer, hondo cuerpo de flauta
donde vivía la música primera
tus ojos son frutas de lejanas tierras
tu alma tiene soledades de otra raza
En ti vinieron a abrevarse las estrellas
A ti bajaron en manada las galaxias
y en tu vientre pusieron una lámpara
y pintaron tu sonrisa con espera.
Se te hincharon de pétalos las venas
tu corazón se transformó en campana
y todo tu cuerpo era una casa
tu mágico cuerpo de alfarera.
De ti salió como la luna llena
era un pan de arco iris una espiga
era el número total de las vendimias
era el cuerpo de todas las cosechas
Tú le diste a beber cada paloma
tú sembraste la música en sus dedos
Y ahora tiene el corazón de vuelo
y mirada de mansas mariposas
Sostenida de latidos atmosféricos
pasó por mi lado como una flor de atmósfera

urgente salto de mi memoria
en ella descansaba un viaje eterno
Por eso mujer, madre del agua
quiero dejarte mi flor hecha de frío
un poco de equipaje de caminos
como el alba lamiendo tu ventana
para que a la hora total horas afuera
tengas aún mi corazón de página
como un humilde altar que te consagra
desde lejos mi madre verdadera

porque pasé a buscar la vida por tu casa.




EL AMOR

No hay
una sola quebradura en mis ojos
una sola ruptura del aire
no hay un solo momento en mi día
que interrumpa la catedral pujante
de mi memoria levantada
No hay un tajo en el silencio
por donde no se escapen ráfagas de canto
buscándote tu cabeza lejana, continente de mujer y de niña
No hay una palabra donde no capulle tu
nombre
una habitación donde yo entro
que no se ilumine de tiniebla viva
de silencio palpitante
de distancia encinta.
El amor viene (vienes) conmigo
como un arco iris para mi cabeza
como un halo de luciérnagas para mi
sonrisa.
Ya te he dicho todo (ya toda mi boca)
pero mi voz no quiere reposo
quiere trompetas calladas
y silencios que gritan
el sonido de las islas solas
el sonido del incendio en una isla
todo para construirle casas a tus ojos
chozas de saliva
trincheras a tu boca nocturna
donde encontrarse en sueños con la mía.
El amor va conmigo
es mi bastón, mi linterna incansable
y mi guarida.




ABECEDARIOS DE SILENCIO

Voy a tratar de ser amigo mío

voy a tratar de preguntarme cosas
me voy a regalar un montón de termómetros
un kilo de balanzas
un litro de espejos
todos los barómetros que sean necesarios
un alambique si hace falta
y voy a romper ese reloj insobornable.
Y me quedaré conmigo a pasar la noche
el día la semana
el año el siglo,
la eternidad completa
sumergiendo instrumentos
analizando piedras
tomándole la fiebre a mi sonrisa
leyendo abecedarios de silencio
hasta responderme
hasta saber quién soy.




POZO DESPARRAMADO

Voy estas fosforescencias
por la orilla de la vida
a veces un poco horario
tantas veces nunca
tanto siempre nada.
Me parezco a las luciérnagas
pero cuando no me enciendo
es que no existo
no tengo otra estadía que la luz
otra palabra que el beso
Sáquenme de encima estos nombres
como muebles antiguos
esos baúles incógnitos
y los pequeños cajoncitos
de hacer cosas útiles
como entrar en las peluquerías.
Yo no me corto nada
tengo demasiado poco
me dejo crecer la sombra
admito cada habitante
Sonrío al que me sonríe
después me apago
soy noche
existo tiniebla
pozo desparramado.
Y en invierno no hay
luciérnagas.




ESTRELLAS DE TINIEBLA

Ahora son las guitarras lloviendo
escalofríos
cuerdas tiritando
aire aterido de canciones-silencio
párpados temblando
un poco de grillos derramándose
espumosa madera
y tú surges de todo
como un vapor de fotografías ausente
y poemas no escritos. Y tú
y yo escribo
Tú y estas guitarras.
Follaje de aire
hojas que chocan y titilan
estrellas de tiniebla,
la soledad es terrible
voy a escribir esa frase
la soledad es terrible
Y estas guitarras apuñalándome
con pétalos.




NUESTRAS FOTOGRAFÍAS

Entre la nieve ordenada de estas páginas
guardaba como el secreto hondo de las flores
nuestras fotografías (polen)
Y mientras soltaba barcos de papel cargados
con mensajes anhelantes hacia mi memoria
tu imagen se caía
llovía escondidamente sobre las frías baldosas.
Alguien las recogió y me las entregó reconocién-
dome
Estaban frías
Pero somos los mismos sobre el papel que nunca
pierde la memoria. Qué miedo tengo de la tuya
y de la mía.
Porque si caemos los sueños sobre las baldosas del tiempo
nadie recogerá nuestras almas. sin imágenes
vacías.




LOS VERSOS QUE NO ESCRIBO A RATOS

Yo no sé qué me pasa esta mañana
que no puedo mirar fotografías
que no puedo asomarme a la ventana
ni leer siquiera una poesía
Yo no sé qué me pasa esta ventana
yo no sé qué me duele esta poesía
qué oculto puñal en las fotografías
¿es que voy a suicidarme esta mañana?

Yo no sé de esta pieza qué me ahoga
¿serán esos implacables espejos?
hay algo que en mi alma se deroga
hay algo que me estoy volviendo lejos
Me parece que el aire me interroga
que se me clavan a fondo los espejos
Hay algo esta mañana que me ahoga
Hay algo que estoy mucho más viejo

Tal vez la inmovilidad de los retratos
la mirada total de la mañana
los versos que no escribo a ratos
me voy a volcar por la ventana




TODO EL INVENTARIO DE MI VIDA

Cada día supero una medida
Cada hora derroto algo definitivo
Cada instante te quiero más que nunca
hasta dónde
ojalá esta primavera me acumule
en un eterno domingo de campanas
y de flores
yo no quiero que hayas sido otra historia
cualquier otro milagro forastero
otra cara
Siento el útero de una inmemorial astrología
pesando en mi memoria y en mi cuerpo
y en mi alma
algo me traía eternamente hacia este encuentro
me arrastraba hacia tus ojos me decía
que aquí estabas
Y ahora todo el inventario de mi vida
todas las alas de mi eterna travesía
echan anclas
en tu vida.




CUERPO DE UNIVERSO

Quiero llamarme con el oro de la abeja
con el nombre del telar de la mañana
quiero mi nombre con los remos de la nieve
quiero ser parecido a una manzana
Quiero estar hecho de greda planetaria
que se peinen cataratas en mis dedos
tener ruido de luna en el perfume
parecerme un poco a cualquier templo
Quiero tener mil ríos en el cuerpo
y mirada de cueva derramándose
ser todo fuera, no tener adentro
como el aire y el silencio amándose
quiero aprender a ser fosforescente
tener algo de mosca, carne de agua
y poder sumergirme entre la gente
y emanar del silencio de una caña
Ser total como la música que mana
entre el cráneo colosal de los planetas
y el oceánico pecho del espacio
frotando sus incalculables cabelleras
Quiero tener cabellera de cometa
ser vertiginoso cayendo cielo abajo
parecerme a una fogata bajo un lago
que mi nombre se escriba con estrellas.
Quiero tener uñas como un mar que late
que me confundan fácilmente con un clavo
caber en la copa de un estambre
que no basta para mí todo el espacio
Y después, con este cuerpo de universo
poner mi existencia hecha de canto
en el momento de entregarte el verso.
al ponerlo como un beso entre tus manos




CON LLAMAS ESPUMOSAS

Me gustan los lugares espumosos
esos rincones con monstruos de pelusas
los bolsillos inefables de los pordioseros
la melena de las palmeras que se han ido a otro planeta
la boca de un Dios muerto comiéndose
una nube
algunas tardes tristes, grises
con manadas oceánicas de lana
el cuello de las palomas que se evaporaron
los cadáveres de las fogatas en la tierra
la llama de los candiles
las habitaciones donde aún no ha muerto nadie
las entrañas aéreas del pan.
Me he hecho amigo de las alfombras
de la ropa vieja que nunca se regala
de los diarios con historia arrepentida
del nido lunar de las gallinas
Y hasta casi del blanco pubis de las olas.
A veces he llegado a ponerme las manos en el pelo,
Buscando lugares espumosos




BUSCO ENTRE MIS ADENTROS

Nunca tuve algo contra mí
siempre quise apoderarme de todo
no sé por qué ahora sucedo
que me miro de frente
me busco en los espejos
me envío sonrisas
y me las devuelvo
Será que desde que nos encontramos
y en la soledad soy mucho más solitario
Busco entre mis adentros
quiero tener lo más tuyo
Y cuando me encuentro
Ya no me siento tan solo
Con algo de tus recuerdos.




COSAS DEFINITIVAS

Alguna vez me empecé a quedar sin dios
culpa de las cucarachas tal vez
que eran demasiadas
y había que ponerles los mismos venenos
que se usan en las iglesias.
El caso es que me empecé a quedar sin dios
se evaporó como un útero oceánico.
Esta cicatriz que tengo no me gusta
Es demasiada
A veces le echo puñados de arena
me desaforo con cosas menos minerales
me quedo despierto por la noche
doy vuelta los espejos
para descubrirlos in fraganti
leo libros empezando por
el modo de olvidarlos
Es inútil
Quedarse sin dios es algo irremediable
Es como de repente
haber nacido muerto.
Por eso miro los astros inexplicables
con ingenuidad esperanzada
y le pido a mis sueños
que imaginen
que me vivan
que me sean
una nave que se acerca
un bote fosforescente
un gondolero con alas
De repente una memoria completa
de cosas definitivas
Un abuelo de diamante
que me seca
la intemperie del tiempo
con una túnica de música.
Porque de repente me empecé a quedar sin dios
y me di cuenta
que mi memoria
es un oscuro pasadizo
Una puerta de llaves caprichosas.
Qué pena que hubiera
tantas cucarachas, de verdad.




QUE LA VIDA NO SEA IMAGINARIA

Desde que te conozco me fijo siempre en las
florerías
Me miro pasar en los cristales
Y me da ganas de cortarme el pelo
Amo al inventor de la fotografía
Me parecen mariposas los sellos postales
Y a veces acaricio a los teléfonos
Desde que te conozco hago cosas sencillas
No tomo más café con el sepulturero
Me olvido de revisar el almanaque
Dejo siempre abiertas las canillas
Me dejo encerrado en las fotografías
Y nunca me doy cuenta de que tengo hambre.
Desde que te conozco lo que más me gusta,
es que todo me parece milagroso:
Recordar quién soy por la mañana
mirar relojes que ya no me asustan
estar adentro de mis ojos
que la vida no sea imaginaria
De verdad todo es mejor desde Nosotros
empiezo a entender ciertas palabras
y me he hecho cliente de las florerías
progreso enormemente con el sonambulismo
Me han echado hace poco de la fábrica
me he comprado un libro de poesías.
Ah! y desde que te conozco
todo el mundo me dice que estoy loco
Que de dónde saco esta cara de alegría.




LLÉVENSE ESTOS NÚMEROS URGENTES

no quiero tratar de ser inteligente
de haber podido inventar cosas feroces
prefiero que me dejen con las flores
llévense estos números urgentes
no quiero que me hagan usar lentes
no quiero ir a discursos ni a reuniones
no me regalen ni fusiles ni relojes
no me recuerden la palabra muerte
¿No se dan cuenta de que estoy enamorado
que no tengo nada de teorema
que ya nunca voy a envenenarme?
el que quiera sentarse aquí, a mi lado
tiene que dejarse crecer la primavera
y olvidarse para siempre de olvidarse.




ALGO MÁGICO QUE ME HACE SER MÁS VIVO

Hoy tengo el corazón hecho un nudo.
del subsuelo de mi alma emergen
como en un remanso que devora
manos que se agitan, gritos urgentes.

Amanecí como arrasado, roto,
como un campamento devastado.
como una iglesia profanada
como una tumba después de un terremoto

Como a una cruz o a un timón, los dos,
como a un bastón o a un mediodía
quise atrapar tu nombre que pasaba
pero las manos de quedarte no eran mías

La vida arrecia con rosas o puñales:
o como el pan de trigo o como el de veneno.
No me importa una muerte equivocada
yo sé cuál es el pan que quiero
si el pan de despertar no es morir sueños

Pero no quiero que mueras con mi muerte
no quiero inundarte con suicidio
Yo te invito a mi mesa, está servida
pero el pan, amor, es sólo mío.

En mi vida verás fotografías
y unos viejos floreros atendidos
Hay un sótano de rito inaccesible
sin embargo no hay nada prohibido.

En mi vida no hay puertas para abrirte
puedes pasar con sólo una mirada
pero antes de entrar, quiero decirte
algunas cosas que ya están gastadas.

Si te bastan estas pocas herramientas,
el poco combustible de mi lámpara,
mis manos un poco enronquecidas,
y mis ojos con restos de batallas,

Ya puedes pasar y acomodarte
Descálzate, si quieres, todo es tuyo.
Tengo sólo otra cosa que contarte:
entre estas sillas y estos muebles sucios

Hay algo nuevo que he encontrado
algo que entró recién junto contigo
que no tiene nada viejo ni gastado
Algo que soy de verdad mucho más niño
Algo que nunca había cultivado
Algo mágico que me hace ser más vivo
Es que nunca he estado enamorado.




ESTA DERIVA CIEGA

Hoy he amanecido con el alma enredada
con la voz que pierde su camino
con la memoria como desorientada
me parece que ni siquiera he amanecido

Una rosa me regala una promesa
una esquina me unta con delito
me asesta el vacío una ventana
Tal vez lo que más duele es el vacío

Es una cosa de verdad incalculable
esta deriva ciega, sin destino.

Esta zozobra de todos los altares
esta prisión de todo mi albedrío

He sentido que tiraba de un cadáver
un lastre acusatorio detrás de mí
era mi sombra, todo mi equipaje
mi rastro, las manos de mi hijo.

Quisiera arrancarme el corazón de cuajo
extricar este nudo a cuchilladas
y llevarlo lejos y enterrarlo
y dejar todas mis huellas enterradas.




ABREVÉMONOS DE BESOS

Con manos clamorosas te busqué
como un ciego
como un gusano clandestino por el
cieno
recorrí cada poro suburbano del te-
rreno,
con lámparas de lluvia exploré cada
hormiguero,
Luego fue la desesperación identifi-
cando el veneno
El otoño me exilió a vivir en
sueños
Y vino la resignación del ciego que sabe
su destierro:
(Yo quería pintar el alba sin conocer los
colores del cielo)
Me eché entonces a dormir en un vino
amargo y lento.
Y ahora algo me sacude, me llama y
me despierto,
es la madrugada, la reconozco, la
estoy viendo.
Esto que siento está fuera pero ya estaba
adentro
no nos enamoramos, nos identificamos
nada más con vernos
nos reconocimos, el amor ya lo traíamos
de lejos
lo traíamos puesto como a un milagro o a un
instinto profético.
Qué me importan ya los dientes del
desierto
La sequía asediante la implacabilidad
del tiempo,
Dame tu mano de escudo abrevémonos
de besos
Entre arenas y cenizas siento que somos
eternos.




INUNDACIONES DE LÁMPARAS

En cada hueco blanco de este cuaderno
se detuvo mi alma y mi deseo a
reclamarte, y te busqué en el aire
para completar mis besos
para lavar el silencio de mis
manos en tu pelo tibio, para
despavorir mis miedos con tus ojos
como inundaciones de lámparas.




EL NOMBRE DEL AMOR DESESPERADO

Te quiero.
Tenía ganas de decírtelo
era la habitual paloma que se
ordenaba dentro mío y tramaba ese
dolor de aire que nos ahoga de
anticipadas libertades
Por eso vine hasta la tinta
a volar a indefinirme a sentir
mi galáctica explosión
mi dimensión de alba enamorada.
Te quiero.
tú no estás a la orilla de mi boca
para oírlo, para deletrear el
oleaje de mi aliento
por eso te lo escribo ahora
en este sitio donde tu ausencia
hincha el espacio
donde tu cuerpo es una urgente
escapatoria donde tus ojos son
el embarcadero de mi alma.
En este sitio donde el amor se reparte
con absurda geometría
donde cada uno extrae de entre páginas
feroces un nombre y una historia
para jugar al tiempo, enmascarados
para jugar a ser o a haber sido
aquí, donde me toca el nombre
del amor desesperado
el sitio de la pregunta irrespondida
la raíz erradicada
el trasplante total de la existencia
aquí, beso las páginas donde me
embarco, me ato al nombre desbocado
de mi personaje y digo a un nadie
que tiene tu cara imaginada
toda la música que me toca.
Digo amor y amo y muero en esta
vida muerta, muero de vida y escenario
con tu ausencia puesta
recubriéndome como una bandera de
besos. Aquí decido lo que soy
broto, desatrapado como el agua
que desorbita la tierra
y una vez más tú eres la meta
el público testimonial, la mano
que pasa a recogerme.
Ya ves, sólo quería decirte que te
quiero.
Son tan copiosos los cimientos del
amor, que abro mi boca para caber
tu nombre y arrecio un pantano de
alas luminosas que me vives dentro.




UN GESTO CONTIENE LA ETERNIDAD

Estábamos predestinados
pero no quiero que seamos destino
quiero algo más mágico
una abeja que elige una flor en la pradera
y eras tú
dios que escribía una poesía
y éramos nosotros.
Tú que te bañabas en un océano total
y eran mis besos.
Un gesto tuyo contiene la eternidad
pero a mi amor no le bastan las
palabras
quiero comerte, beberte al tiempo
que me respiras y masticas
los dos con dimensión de atmósfera
humo en la niebla
silencio y canción
lámpara y sombra
mezclados infinitesimalmente en
el vientre de un átomo
infinitamente unidos.
Tal vez es nuestro amor que escribe
la poesía. y es dios.




UN DÍA

Un día estaremos sentados
a la sombra del tiempo
de la mano
leyendo tus versos y los míos
los dos como una sola flor
la que hubiera sido el infinito
si no se hubiera derramado.
Un día, amor.




RUINAS DEL ALIENTO

Entre palmeras de multiplicadas manos
inmóviles alas de abanicos
sobre la hierba cómplice
entre el aroma sonoro de los eucaliptos
sobre la tierra desvestida
sobre algunas piedras huérfanas
contra la tumultuosa cabellera oceánica
recogíamos piedras o caracoles
cazábamos canciones en el aire
y atrapábamos las palabras
con que ahora edifico estos recuerdos.




CLICK

Ya está la foto.
No puedo entender que fuéramos
que ese tiempo de beso
tiempo de nosotros
en que atrapábamos la vida
se haya vuelto papel de fotografía
y yo la mire solo.




SIN DESTINO

Esta zozobra de todos los altares
esta prisión de todo mi albedrío
Es una cosa de verdad incalculable
esta deriva ciega, sin destino.

No te asustes de esas cicatrices
son parte de mis gestos, son sonrisas
—No entiendo bien lo que me dices.
¿Que de quién son esas fotografías?

Me parece que son de una película
me las traje puestas desde el cine.

Ahora mientras te quitas los zapatos
voy a echar al fuego alguna leña
de paso tiro esos retratos.
Podrías abrir esa botella?




CORRO POR LA INCERTIDUMBRE

¿Sabes que a veces se me esfuma
tu perfil? corro por la incertidumbre
desesperadamente como queriendo
atrapar un perfume en el aire y cuando
lo logro, como un buzo que emerge
por el polo salgo de los misterios de mi
memoria con mi tesoro en la boca.




DEMASIADAMENTE HERIBLE

Hace poquito, apenas diez minutos
estaba en la habitación escribiendo un poema
y tenía la voz algo nublada, casi
como callos de callar en el aliento. Y no
podía dibujar, la música se me caía del
pincel, el aire estaba lastimado (se han
muerto demasiadas palomas en el mundo).
Entonces cazando con mi arco sin flechas
ante un público fantasma Me sentí
vulnerable demasiadamente herible por
afuera y me metí en tus ojos que
estaban dentro de los míos y dejé
que mi voz rodara como un tronco usado
sin miedo del espacio ni de la
ausencia de las golondrinas.
Te llevo como un escudo por dentro
emperatriz de mis dientes.




EL MAPA DE LA FELICIDAD

El mapa de la felicidad es cualquier
parte
tu mano ecuatorial es la partida
si tú caminas conmigo
puedo fundar rosas con mi pie
puedo enseñarle a adorar a las avispas
averiguar el secreto melodioso
de la cola musical de las ardillas
y si la dibujo con mi dedo y tú sonríes
toda la tierra me regala su sonrisa
contigo puedo ir a cualquier parte
hay un solo país que me intimida
es un sitio cualquiera en que me encuentre
y esté solo con tu lejanía.




ME RECONOCE PERO NO ME CONOCE

Hay alguien que no lo sabe aún. Que pasa
tranquilo por delante del espejo
Hay alguien que no sabe que está
muerto
que no sabe que no es ésa su mirada
(que no sabe que le sobra un sueño una
ignorancia)

Hay alguien que puede abrir la puerta
con la misma mano cotidiana
Hay alguien que no sabe la sorpresa
que camina con olor a puñalada.

Hay alguien que lleva entre la carne
una atroz herida hospitalaria
hay alguien que aún no ve la sangre
cayéndosele de las entrañas.

Hay alguien que me mira como siempre
que no entiende mis manos a la espalda
que sospecha unas rosas o claveles
en lugar de la honda cuchillada

Me reconoce pero no me conoce
Sabe que me ha visto cuándo y dónde
Hay alguien que no sabe nada

Yo traigo detenido su reloj en mi bolsillo
Yo traigo su mirada ya apagada

Y un retrato en la mano del cuchillo.

(Es el tuyo, dime cómo he de matarla)




DOSIS DE AMOR

Quisiera que fuéramos los dos
tomados de las manos
tomados de la saliva
atados del aliento
enredados por la mirada
sin haber sabido contar nunca
sólo guardando el número 1000
para decir estrellas
para numerar palomas
para saber que ése es el número
uno de los besos
la mínima dosis de amor entre los dos.




ESTA SOLEDAD...

De repente siento que me he vaciado
que soy un vertedero de una
destituida ciudad del aire
siento que soy una sentina de despojos
donde se pudren las carcasas
de algunos monstruos descartados.
Todo género de criaturas
se demora a exagerar mi podredumbre.
Esta soledad me ha desmesurado tanto...
Espero cualquier milagro
una ventana que mire hacia otros
sitios
podría pasar a hacer un nido
en mi nariz.
Estoy harto de mis sienes
que no inspiran ni la más
elemental arquitectura
ni una gaviota ha querido
refugiarse en mis orejas
Los escarabajos creen que soy
el mueble donde se guarda
el demoníaco insecticida.
Y se van por supuesto.
Tal vez fuera mejor ser ese mueble
así tendría el veneno por adentro.
Estoy harto de esta coraza
de kilómetros hacia cualquier parte
Voy siempre empapado de meses
huelo a moho
de eterna postergación.




NO SÉ POR QUÉ

No sé por qué no puedo quedarme
con el aburrimiento
con la tranquilidad
con la paz de las ventanas
—algunas—
con un copo de tedio
y un amainado vapor
de besos colgando de mi boca
No sé por qué no puedo
morir de tiempo
y debo suicidarme
vivir de súbitas lámparas
de relámpagos agachados
que me asaltan
de emboscados fervores que me
iluminan de repente.
No sé por qué.
Dejo mi cama al alba
Dejo mi hambre
clavado en un pan manso
como un furioso cuchillo
y cierro mis ojos sin
portazos
Despidiéndome a mordiscos
de cada lentitud
cada amansado abismo
cada espejo de lenguaje cotidiano
cada nombre que he sido
obedientemente.
No sé por qué.




TIRAR LA CARTA Y UN POCO DE TU VIDA

Escribiré una historia para no contarte nunca:

Era una desnuda casi tímida mañana.
Por una calle tímida y desnuda
un poco trigo y otro poco llamarada

tú llegabas enumerando las esquinas.
Y bajo un árbol para el que faltó palabras
como un pájaro cualquiera tú te detenías.

De un bolsillo donde viven con veranos
a veces unas lacias golondrinas
tú extraías una carta entre tus manos

y despacio silenciosa la leías.
Aún no era la hora de encontrarnos
faltaba un poco para el mediodía.

Sacaste tu cuaderno de jardines
y acariciaste con tu boca algunos pájaros
yo nunca habré sabido qué escribiste.

Era una plaza tranquila como un lago
como aquella donde deletreábamos la menta
el cielo estaba quieto como un barco.

Era tan fácil que fuera como aquélla.
A lo lejos alguien se acercaba
te peinaste con la sonrisa alerta.

Eran más las mariposas en las plantas.
A lo lejos... Se cerraba la promesa.
Y tus ojos en azul se evaporaban.

Querías esconderte, transformarte en amapola
y asaltarme al pasar bajo las ramas.
De repente se incendiaba cada cosa

todo el día en tu mirada que temblaba.
En tu alma remontaba una gaviota
y diluvios de ausencia se secaban.

Era la hora en que los sueños se cumplían
era el momento en que tus vidas se juntaban
y en que se besaban los astros y las profecías.

Era el mismo tiempo que en las cartas.
De repente algo en ti que se encogía
algo extraño en la figura que llegaba.

Pusiste tu cara entre las manos
tu clara cara enamorada.

Como cualquier hombre siniestro pasa
no era yo, esperas todavía
con la paciencia quieta de una casa.

El mediodía ya te da la espalda
la tarde remonta su rostro solitario.
Tal vez ya no vendré, tal vez mañana.

Por la misma calle de sonido lánguido
todavía espiga pero ya apagada
te vuelves sueño atrás, con roto paso.

Vas goteando mi carta por el aire
hay algo atrozmente desolado
de repente mi nombre es: nadie.

El tiempo llama a un sueño largo
con nudillos de nieve y de agonía.
Puedes olvidar el sitio, la calle y el árbol

tirar la carta y un poco de tu vida.
Ya no vendré, me atraparon los zapatos
del rastro que me precedía.

Ésta es una historia que nunca habré contado.




EL AMOR TOTALITARIO

Entre vertiginosos glaciares
y volcanes eyaculando
entre frenéticos galopes oceánicos
entre raíces de mano denodada
partiendo la mandíbula terrestre
entre semen de mariposas y sonámbulos
entre la madera yéndose
de todos los violines enterrados
donde pisa la luna como un
gato
en los cementerios de las rosas
en cada alvéolo residencial de los veranos
en las tráqueas furiosas de
la tierra
quiero que repartan la ceniza
de tu cuerpo y del mío
quemados una noche
persiguiendo el orgasmo por
los huecos raudos de tu carne
así haremos o seremos
el amor totalitario
y no seremos parte de la tierra
sino que ella será una parte nuestra.
No me basta la vida para amarte.




ALTAR DEL UNIVERSO

A veces pienso que eres una niña
aunque haya algunas cruces en tu cuerpo
y tu mirada tenga cicatrices
A veces tropezando y recogiendo
las remotas ruinas de tu aliento
siento que tu edad no pertenece al tiempo
que tu voz de arrecifes martillados
acaba de nacer en una espiga
y viene de lejanos puertos
Te pareces a un Dios aún no inventado
a un altar para todo el universo
Tal vez por eso eres una niña.




LEVANTO UNA ANTORCHA DE SUEÑOS

El aire viene con turbias herraduras
a pisotearme los párpados
el silencio viene con inmovilidad turbulenta
Yo levanto una antorcha de sueños
esgrimo una estocada de poesía
Y muero con tu nombre entre los dientes
acribillado de ventanas y relojes




LA PÁGINA GRANDE DE PALOMAS Y VERSOS

I

Es la hora de ti, es cuando llegas
y atracas tu perfume inmenso
entrando como el alba por la puerta.

II

Intento medir la poesía con tu nombre
pero no me alcanzan las palabras
para contenerte.

III

De tanto llorar alimenticias muertes
hay cal en mis ojos para esta catedral de llanto.

IV

Hay rincones que arrecian sobre mi corazón
tú arreciabas mi corazón.

V

He llegado hasta la soledad
al puente del tiempo
al lugar donde creciendo
se quiebran las palabras y me canción
Me. Canto.

VI

as never
as possible

VII

Vivir somos esto.

desollados como la harina

VIII

Quiero morder tus ojos
caberte en un firmamento de párpados
y no mostrarte nunca la salida.

IX
HUELLA

Por aquí pasé y dejé esta huella como testimonio
de mi búsqueda. ¿Dónde estabas
durante toda la lejanía?

X

Estas horas me acantilan detrás de mis ojos.
Soy un rey de traje chamuscado, sentado en su desvencijado
trono, en el medio de una ciudad derrumbada y
arrasada.

XI

honda flor de
ausencia
hondamente flor
de soledad, las
sirenas de la noche
llaman pero
el silencio no
tiene partida

XII

Esculpo inmensidades de
sed en mi boca, anticipando
el polen de la tuya.

XIII

Como un hechizo, surge entre vahos de silencio y delirio
el milagro peninsular de tu cabeza, como un faro
para las naves de la espera

XIV
CON TU VOZ AL ROJO VIVO

harapiento de lámparas

tu voz salta como un arco
como un gato cereal en el teléfono.

XV

ven, bébete mis manos en celo.
bébete de un sorbo mi deseo
como un monstruo acechante y oculto.

XVI

Aquí mi boca te buscaba en el aire
y recogía una promesa

XVII

Besos, besos
como pasos de eterno
caminante por tu
cuerpo.

XVIII

en el fondo
reseco de los
lagos viven mis
caricias como
alas arqueológicas.

XIX

Como sigue tu cara después de las fotografías
como se desinmovilizaba que decías

XX

Siempre
empieza
constantemente
como un río
este amor
que no termina
nunca

XXI

me regalaste una tormenta de claveles.

XXII

amarte
con mañana

a tu estatura

XXIII

exiliado a un sueño, como un sobreviviente
exiliado al vino

XXIV

Como un pabilo ardiendo constante (como una vela)

tu imagen arde.

XXV

tu boca es la desembocadura del
alba
manantial del universo
cerrojo de palomas emigradas
y además la canoa de mis besos
(y la quilla de tu lengua)

XXVI

efigie

Tu pelo de gaseoso trigo

terrestre anatomía

XXVII

con dedos melodiosos
deletreabas la menta

XXVIIII

para cantarte

mi amor
a quemarropa

XXIX

If I could lock your memory
with my dreams
If I could

XXX

No me dejes en esta tiniebla de tu vida
con mi soledad. Dile que se vaya, que me deje
solo.

XXXI

Hoy te extraño como nunca
¿cuános siempres caben en el nunca?

XXXII

Dios es tantas cosas que no puede decir yo.
cuando dice yo dice nosotros

XXXIIII
BIER KELLER

cuando fui a este sitio
tenía tu carta en mi mano
y mi corazón se remontaba
como la primera paloma del día

XXXIV

Mañana estaré más cerca de tuyo
tendré mi billete en la mano.

XXXV

atracando canciones
en tu oído
me volví ancla de besos
horizonte de sonido

XXXVI

Cuando a veces
me miras como el pan
me dueles ese
hambre de tiempo demorado
que nos esperamos mañana.

XXXVII

amortajado de sombras voy esta sonoridad de silencio por el borde
más ingenital de la noche. Tu imagen me arroja una lámpara
tu boca una antorcha de sonido para incendiar al silencio.

XXXVIII

ésta es una
isla de besos
que te buscaban.

XXXIX

Recién ahora que somos
sé que nunca he querido ser
otra persona.

XL

Pasando por aquí, tuve ganas de absorberte
los ojos

XLI

Como en una selva de
trébol, viven insectarios besos
entre las papilas de mi
lengua

XLII

Hay jirones de perfume todavía

XLIII

Ahora siento que mi cuerpo
es un compacto nudo un pan un ladrillo de tajos.

XLIV

Las vidas ruedan como el agua hacia los valles.

XLV

Ya no tengo dudas de que la vida
es una fábrica de sueños. ¿Por qué diablos
entonces, no me dejan dormir?

XLVI

tu cuerpo de
misteriosas catacumbas

XLVII

Quiero un idioma que no tenga silencios
para callar a fuerza de mirarte

XLVIII

archipiélago
de besos

fusil de besos

XLIX

De tanto bajar por petrificadas venas
buzo mineral
de tanto recorrer el pasadizo
que conduce a mi memoria
tengo este olor a catacumba
esta mirada de bodega
donde maceran venenos.

L

Cuando no estamos juntos
me sobro.

LI

Quisiera ir a vivir en una flauta
para que cuando tú fueras a soplar
entrar sigilosamente en tu boca y
trasladarme dentro tuyo para
siempre como un parásito enamorado.

LII

Ven a vivirme, la soledad me amortaja
con manos deshabitadas.

LIII

El viento de la noche hurga
con frenéticos dedos multiplicados
el jadeante follaje
la luna es un sonido quieto
congelado

LIV

parásito de luz
con manos desterradas.

LV

Secundo mi propia profecía de ser

quiero secundar mi
propia primavera

LVI

Sacar de mí todos los cobardes
No quiero construirme un seudónimo de palomas.

LVII

Si puedo permanecer impasible

LVIII

cuando te digo que te quiero
el alma se me acumula en
la garganta

LIX

camuflado
mi corazón chisporrotea
trueno, esculpido, virola
y entrabas arrollando como la primavera

LX

Tú me abundaste las manos de vertiente

LXI
EL NOMBRE NUEVO DEL AMOR

Mis pies son el pedestal del delito.

cambiar los zapatos de mi historia

subordinado dedo
SE ME HA|ROTO|EL|ANILLO!!!

LXII
EL MONUMENTO DEL SONIDO

No sé con
qué palabra ofrecértelo
para que no
se me derrumbe

LXIII

mis sombras se agremian en sectas de silencio
silencio adentro
como cotidianas razas de palomas quemadas

LXIV

Ya estoy cansado de no ser Dios
estoy harto de no haberme muerto nunca
Sáquenme de aquí
ábranme los ojos
déjenme volver a mi memoria.

LXV

llevo la luz de tu piel en mis manos que saben a sombra

LXVI

Sólo alguna vez el sueño no pierde el rostro.
Sólo alguna vez el silencio sabe qué palabras.

LXVII

Tu orgasmo como un escalofrío del mundo.

LXVIII

Tantos tiempos hay en un mismo tiempo,
tiempo de tantas cosas.




DÉJENME DECIR QUE TENGO MIEDO Y HAMBRE

Llévense todos estos seudónimos
esas fotos retocadas
esos currículums vitae inundados
de nadie.
Déjenme solear mis cicatrices
déjenme decir que tengo miedo y hambre
No quiero tumbas de plata
quiero más mucho más,
toda la tierra
déjenme vivir mi muerte con naranjas
transcurrir estas lánguidas palomas.
Déjenme solo con la melancolía
y con la palabra gata
que es mi preferida.




MIS SUEÑOS DE AIRE

Voy a expulgarme hasta el último clavo
voy a tironear de todos los cobardes
que tengo por adentro hasta sacarlos
los voy a clavar en un espejo
Voy a quemar sus ojos pedernales
y a pisotear cada uno de sus dedos.
No quiero un seudónimo de palomas regaladas
prefiero renunciar todos mis sueños de aire
quiero la justa medida de mi alma
acepto llamarme incluso: nadie




ÁTAME, CLÁVAME, INCRÚSTAME

Téjeme un vuelo con tu aliento
píntame un olvido en mis recuerdos
dibújame un ancla con tus dedos
que se me vaya metiendo muy adentro
dame a beber tu sonrisa sin inviernos
lávame con tu lengua todos estos senderos
después podrías secarme con tu pelo
y cantarme esa canción que traes de tan lejos.
Átame muérdeme no me dejes suelto
clávame suéñame no me dejes tiempo
incrústame en tus ojos no me dejes lejos
Apaga por favor esos espejos.
Diles que algunos caminos ya me fueron
Cierra ya la puerta, démonos un beso.




MEJOR QUE LOS SUEÑOS

Un poco de vino para imaginarte
un libro de poesías para oírte
un jardín perfecto para sospecharte
Y luego vienes tú y comprendo
que no hay ninguna imagen que me alcance
que eres mejor que los mejores sueños.




VENAS DE LA DISTANCIA

Esos caminos misteriosos
que no sé dónde conducen
todos me parecen las mismas
venas de la distancia
Caminos de partir
Cuántas lejanías esperan
detrás de cada rastro?
mujer, lámpara mía
no soporto las cicatrices
de la tierra
y menos mojadas por la lluvia.




LA POESÍA SE ESCRIBE A VECES

La poesía se escribe a veces
otras veces sólo se respira
a veces no tiene palabras
a veces le falta la tinta
Otras veces son inútiles
estas casas de tablas en fila.
Hay un vaso una sed una guitarra
pero puede que falte la poesía
La poesía se escribe a veces
y otras veces es cuestión de vida




HAS ENTRADO COMO UN VENDAVAL

Has entrado como un vendaval
pero no has golpeado puertas
no has empolvado las fotografías
no has deshojado ni los calendarios
ni las viejas rosas
has entrado como un vendaval
y has seguido tu camino
conmigo en tus brazos,
tal vez la puerta se ha quedado abierta.




NO QUIERO AGOTAR TU SONRISA

Ahora debo callarme
mi voz tropieza a cada letra
como un extenuado mensajero
Además no quiero cansar
las sorpresas escondidas en tus ojos
No quiero agotar tu sonrisa
No tengo otra cosa que decirte
que la piel incalculable del aire
esta distancia lentamente
y tu rostro que nunca se disipa.
Debo callarme ya porque…
perdona! no quería despertarte.




ME SIENTO COMO VIVO ENTRE LA MUERTE

El invierno está llegando con su
aliento desolado
desmantelando verdes cabelleras
instaurando sus dientes extendidos
cancelando caminos con pétalos helados
Es el advenimiento del tiempo
los jardines se van por la ventana
La poesía es más difícil
como caminar entre los labios
múltiples de la nieve
Ya no tengo el color justo del geranio
los plátanos me muestran su inmovilidad
leprosa, su estructura de cicatrices.

Todo parece más viejo y más lento.
Me parece que nunca voy a volver a verte
Desde este asedio nevado
me siento como vivo entre la muerte
entre la postergación y la demora
como una semilla entre la roca
como el último poema de un soldado
que agoniza sin papel ni testimonio.




SIEMPRE LA MISMA MESA PARA EL MISMO HAMBRE

La tierra es la misma en todas partes
la misma mejilla
los mismos párpados los poros
los mismos hormigueros
guantes de la lluvia
la tierra es la misma en todas partes
donde yo vaya con estos mismos ojos
y esta memoria que siempre se me inunda.
Siempre la misma mesa para el mismo hambre
y el mismo pan en marcha sin reposo
siempre el invierno y el verano equidistantes
y las otras estaciones genitales
La tierra es la misma en estos ojos
a veces incendio en los estambres
a veces un otoño de despojos.




ESTOS LINGOTES DE POESÍA

Poco a poco, verso a verso
lágrima a lágrima me acerco
a la interrumpida senda
donde termina mi alma de mina abandonada
toco estas palas
aquel montón de mineral humedecido
estos lingotes de poesía
mientras me voy internando
con la lámpara apagada
con pasos de espejo con ojos de recuerdo.
No puedo ser la vida de memoria
De la entraña que muerde su mordaza
de la veta que se descalza su hondura
viene cada flor vencida
cada palabra como cadáver de paloma.
(Me he dicho que no debo
tener miedo de esas fotografías
que me espolean con remordimientos.)
No debo tocar los andamios desvencijados
no debo cambiar ni un escombro de lugar
porque las galerías
podrían derrumbarse sobre mí.
Mi vida me espera con mañana
a la desembocadura oscura
de esta caverna.

No quisiera tener acceso a tu camino
de tu mano clara
dejando detrás de mí un derrumbe
indescifrable.
No quiero que seamos con alguien
que no soy
Quiero nosotros con integridad
de isla infinita.




MIENTRAS YO VIVO ME LEVANTO Y CANTO

No voy a tener miedo del oprobio
no voy a respetar ajadas leyes
no quiero los yugos de los bueyes
prefiero la paz de los microbios

No necesito las llaves de las puertas
mi cabeza me sirve como ariete
quiero tener corazón de barrilete
zarpar sin anclas derramarme sin compuertas.

No me vengan con espejos destituidos
a mostrarme mi imagen con espanto
mientras yo vivo me levanto y canto
y todos crujen con cementeriales ruidos.

no quiero saber ya nada de esos cauces
quiero errar por la copa de los pinos
como lluvia de dedos peregrinos
Desde el cráneo de la tierra hasta sus fauces.

Ya no quiero acatar estos zapatos
mi corazón se voló por la ventana
déjenme hacer el amor con la mañana
Déjense ya de apuñalarme con retratos.

Quiero todas las alas de la nieve
irme innumerablemente por el viento
estas que dejo son de un vuelo lento
quiero otro de vértigo, más leves.

El que quiera para el aire una cadena
el que tenga candados para el canto
puede adelantarse para uncirme al llanto
y dejarme allí para morir de pena

Yo sé que el amor ya es desusado
que ya no se usan las tenues mariposas
que hay clavos de dolor para las rosas
que las palomas vuelan con candado.

Pero yo no quiero irme a ningún cielo
no quiero ángeles de sonrisa obligatoria
ni caballos de plata para remontarme, ni gloria
ni alas prestadas ni regalado vuelo.

Prefiero morir con mi rumbo funerario
y elegir por estrella de mis pasos
tu sonrisa que tiene algo de ocaso
e irme a un infierno mucho más hospitalario

Pero yo tengo en himno el aliento y la mirada
y ando entre los jardines sobrevivientes
pintándome con estrellas y lágrimas los dientes
Y ya no me queda rabia para nada

Para qué decirles con esta voz su nombre
es una mujer de plenilunio y de manzana
tiene hondura de cielo y mirada que mana
salió de la tierra con el rumbo de los hombres

es hija es amiga y es hermana




LA ESTRELLA DE MIS PASOS

No quiero irme a ningún cielo con alas
regaladas ni prestado vuelo
no quiero ángeles de sonrisa obligatoria
como caballos de plata para remontarme
prefiero morir con mis propios pasos
funerarios
irme a un infierno mucho más hospitalario
mordiendo rebelión hasta enterrarme
y elegir por estrella de mis pasos
tu sonrisa que tiene algo de ocaso
aunque se alcen bosques de condena
y desaforados alaridos y me quemen
en una hoguera de podrido semen

un infierno de tus besos será mi única cadena.




ESTA TRISTEZA YA NO TIENE LÁGRIMAS

Me siento solo con todas estas cartas
cuando escribo, tú lees por mi mano
pero a veces releyéndolas callado
me siento atragantado de palabras
Sonámbulo camino por las páginas
como el último noctámbulo trasnochado
me acerco a conversar con ese gato
esta tristeza ya no tiene lágrimas

Este cuaderno es una larga casa
que edifico con la boca y con las manos
para que traigan tus ojos su verano
a iluminar a nacer cada palabra
Por eso en estos versos me siento abandonado
porque tú aún no has llegado con tus lámparas.




TODO EL SONIDO EN SÓLO UN VERSO

Quisiera para mi boca unas aves sencillas
la voz de las cañas el olor del agua
para tejerte canciones que vuelen descalzas
que sean como el nombre de la melancolía
Quisiera el cuerpo torrencial del mediodía
para que mi voz no necesitara alas
y las venas de las alcantarillas
para asaltarte dentro de tu casa
Quisiera cantar con el silencio
abrir mi boca todo el aire
tener todo el sonido en sólo un verso
hablarte con todos los lenguajes
regalarte de canto el universo
y seguirte cantando con callarme.




TU NOMBRE QUE YA SOLO ES UNA CASA

Aquí había una hoja en blanco
un pedazo de hierba nunca hollada
de este camino de estelas ensanchadas
tengo que llenarlo.

Calafatear, como una abeja minuciosa
con boca textil teje la celda.
Cualquier célula del aire me sirve de cera
este panal es la casa de las rosas.

Basta que al final de mis murallas
ponga como cruz que todo lo tripula
la estrella capital de esta arquitectura
tu nombre que ya solo es una casa.

No debo buscar desesperado
algún material que me sostenga.
Algunas páginas ya tienen piedras
aquí puedo poner los lagos.

Hay otras extensiones más boscosas
territorios de avidez y precipicios
Cuevas feroces, anatomía de sismos
este planeta tiene muchas cosas.

Lo que no debe tener es un país en blanco
una pradera sin hierba ni tierra
No hay lugar para el vacío en mi pradera
por eso estoy aquí con mis palas al trabajo

Llenando con la carne de las cordilleras
este valle vacío, inhabitado.




LOS RESTOS LUMINOSOS DEL ENCUENTRO

Ahora ya tengo que levantarme
hay sirenas zumbando en mis zapatos
mi camisa revolotea por la pieza
hay fotografías que este día me esperaba
Voy a meterme bajo la ducha
Quiero entrar limpio a la aritmética del aire
Ya no importa que el agua me destruya
que irrumpa con sus dedos suaves
devastando el olor de nuestra noche.
Todos aquellos trofeos sagrados
las huellas sonoras de tu cuerpo
están a salvo en las grietas de mi alma.
Además me he cambiado tanto de camisa
mejor es de verdad que ya me lave
no quiero confundir con el silencio
con el aire viudo de esta pieza
los restos luminosos del encuentro.




OVARIOS DE LA MAGIA

Dibujaría palacios de música
cataratas de violines con heridas
palomares de flautas
y arpas torrenciales
construiría espacios con acordes
cañaverales infinitos de guitarras
llovería lentitudes como nieve
arreciaría telares de canciones
Desbocaría los brazos de un relámpago
y en una orquesta de cielos derretidos
en un tornado de gargantas planetarias
en los exactos ovarios de la magia
como un diamante arrullado por volcanes
pondría tu corazón con cuidado.
Todo para que no se apague tu sonrisa
para que no se extingan los manantiales de tu
boca.




MORIR DE VIDA

Puedo morirme de aire
de puñal de vino de fotografías
de un martirio cualquiera,
de poemas, de páginas vacías
puedo morir de vida, la única manera.
De qué puedo vivir ¿entonces?




NUESTRA CANCIÓN

la canción cae al alma
con mojados dedos
con gotas de piano
Mi garganta se agacha
mi memoria se arrodilla
la canción busca mi boca
para llevarla a tu oído
La canción tirita
La canción tiene frío
Que ya no la canten
los gondoleros ebrios
ni la canten los niños
ni la canten los presos
que nadie la cante
que no la hayan escrito
Que se quede en tu cuerpo
que se quede en el mío
Que se la olvide el aire
que la olvide el sonido
Que ya nadie la cante
que nunca haya existido
Que se quede entre nosotros
como un tácito himno
que suene solamente
cuando yo te miro
que ya nadie la cante
ni el silencio infinito




Y YO SOLO PARA LA SOLEDAD

100 pinceles para tu cara
todas las flores para tu olor
todas las mariposas que flotan la mañana
para poder tu mirada
todos los vientos para tu voz de camalotes
flotando en la luna
y sólo yo para tu distancia,
retrato absoluto de la soledad.




CIEGO Y A TIENTAS

si tú supieras lo que es cruzar
ciego y a tientas los inmensos
territorios de silencio y de soledad
por las noches sin luna y sin barandas
mordiendo los ojos con los párpados
apretados de fervor sin fe
y las manos cerradas sobre el lugar
que dejaron las tuyas
y el nombre tuyo dicho a veces
ronca e inconscientemente
como si susurrara

"dios mío"




PEQUEÑA MÍA

Pequeña mía, camoatí de melodías no inventadas, cueva de flautas pastoras del oro
Quiero hablarte a veces
sin decirte nada. Pasear
de tu nombre por la atmósfera, volar de tu mano por la música, acampar en una mariposa y clavarme una manzana para tener un corazón.
Tal vez en las olas del tiempo, tal vez con las prestadas sandalias del destino, tal vez porque sí, porque dios, porque caminos; yo no sé por qué pero nos encontramos.
Ahora me parece que saliste de una profecía, que a través de muertes y mañana vine buscándote y que ya mi brújula puede echarse a dormir como un fiel perro de caza. Tu voz es la medida exacta de mi oído, tu cuerpo es el barco de todas mis tormentas, tus ojos tienen enterrados talismanes, tu pelo es el país natal de mis caricias.
Tú me indultas lo más arduo de ser hombre = ya no me pregunto por los irrespondibles dioses. De repente comprendo que vivir era una búsqueda y puedo dormir calentado por el fuego donde se queman mis gastadas herramientas de caminante.
Me he preguntado muchas veces por qué tejo estas redes, qué quiero pescar con mi poesía. Era tu alma, un pez originario. Pero las redes cayeron de tus ojos y estaban tejidas con hebras de vuelo de golondrina. Y no eran redes de atrapar, eran como manos de secar el sudor de las bestias atrapadas, toallas de sueño para los que nacen enterrados.
Me contaste que te amamantaste de lámparas, que pacía en los espejos de tu cuello sus raíces de luz la madrugada.
Me contaste que a veces te vertías por las ramas amargas de la noche y volvías hecha de rotura y extravío.
Me dijiste que tenías cementerios en la boca y algunas cruces en la piel y en las palabras.
Me contaste de dioses de diamante que bajaban con los ojos por el aire y me enseñaste a jugar a ser un dios de ésos.
Y cuando te tocaba yo tañía el universo.
Me contaste tantas cosas, por ejemplo que la boca no era herida ni dolía, que ése era el sagrario de las profecías, que todo lo que hacía era de besos.
Me enseñaste a jugar a los naufragios. Yo tenía alguna sal en mi madera. Pero tú eras mares diferentes y me devorabas y me devolvías.




PARA QUÉ NOMBRAR TODO EL AMOR

Duele muerde devasta
se hincha como la música en un templo
salta gime vuela, lámpara
ilumina, canto, oscuridad
para qué nombrar todo el amor
vivir es escribir su nombre.


JORGE LEMOINE Y BOSSHARDT


¿ Te gustó este poema? Compártelo:
Compartiendo el poema con tus amigos en facebook ayudas a la difusión de estas bellas creaciones poéticas y ayudas a dar a conocer a los poetas.




 Compartir
Redes sociales
Facebook Twitter Google Bookmark MySpace Fresqui Meneame