Post scrpitum
Poema publicado el 08 de Enero de 2010
Hoy es viernes diecinueve;
llueve copiosamente
(son las once de la mañana
Y aún visto pijamas)
la cimarra me ha tocado;
estoy ausente con mi cuerpo
y muy presente con mi mente
Tempranamente comí digüeñes
frescos
tenían sabores secretos
como las comidas de la pensión
cuando estaba en la universidad
y que me fiaba los almuerzos;
eran tan deliciosos,
tan puros
tan celestiales,
que aprendí con ellos
a cerrar los ojos
estando despierto.
(me gastaba la plata
comprando libros usados
que devoraba bajo la escuálida luz
que emitía una ampolleta de 25 watt
de mi cuarto siempre oscuro…)
cuando abría la ventana
sólo entraba el frío
y el pitar de las locomotoras
negras,
de las que siempre pensé
que tenían almas blancas;
hoy están muertas;
los asesinos aún deambulan
por cárceles
y hasta por las calles…
Pos Data:
Hoy es sábado:
ha continuado lloviendo
y desde aquí puedo ver
cómo una decena de codornices
corren sigilosamente
hacia su objetivo:
comer del trigo naciente de mi vecino.
Me acordé de Selva Oscura
allí donde nací;
las codornices me hacían soñar:
que las atrapaba
y entonces en un corral de coligües
serían mías, sólo mías…
…y así son mis sueños:
livianos
gráciles;
la almohada es siempre
de edredón.
Por ahí caminas tú;
__no de vez en cuando__
sino que siempre:
silenciosa
agazapada
como yéndote
hacia las sementeras
de otros entornos distantes:
…y no me queda ni siquiera una pluma de mis sueños
para prendérmela
en la solapa de mis ansiedades inútiles…
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Poema publicado el 08 de Enero de 2010
Hoy es viernes diecinueve;
llueve copiosamente
(son las once de la mañana
Y aún visto pijamas)
la cimarra me ha tocado;
estoy ausente con mi cuerpo
y muy presente con mi mente
Tempranamente comí digüeñes
frescos
tenían sabores secretos
como las comidas de la pensión
cuando estaba en la universidad
y que me fiaba los almuerzos;
eran tan deliciosos,
tan puros
tan celestiales,
que aprendí con ellos
a cerrar los ojos
estando despierto.
(me gastaba la plata
comprando libros usados
que devoraba bajo la escuálida luz
que emitía una ampolleta de 25 watt
de mi cuarto siempre oscuro…)
cuando abría la ventana
sólo entraba el frío
y el pitar de las locomotoras
negras,
de las que siempre pensé
que tenían almas blancas;
hoy están muertas;
los asesinos aún deambulan
por cárceles
y hasta por las calles…
Pos Data:
Hoy es sábado:
ha continuado lloviendo
y desde aquí puedo ver
cómo una decena de codornices
corren sigilosamente
hacia su objetivo:
comer del trigo naciente de mi vecino.
Me acordé de Selva Oscura
allí donde nací;
las codornices me hacían soñar:
que las atrapaba
y entonces en un corral de coligües
serían mías, sólo mías…
…y así son mis sueños:
livianos
gráciles;
la almohada es siempre
de edredón.
Por ahí caminas tú;
__no de vez en cuando__
sino que siempre:
silenciosa
agazapada
como yéndote
hacia las sementeras
de otros entornos distantes:
…y no me queda ni siquiera una pluma de mis sueños
para prendérmela
en la solapa de mis ansiedades inútiles…
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