Llanto
Poema publicado el 23 de Noviembre de 2010
Hoy es el día más triste de mi vida,
Esta triste y amarga,
Triste porque quiere de verdad,
Amarga por dolor de aquella falsedad.
I
La estrella que siempre miraba en las noches,
No fue una estrella sincera,
Dejo de brillar su esplendor,
Y en mí solo dejo dolor.
II
Yo era el sol,
Daba calor y vida,
Ella era mi espejo la luna,
Como ella ninguna.
III
Lo llegue a querer tanto, tanto,
Que me aferre a mal paso,
Paso a paso me destruye,
Me mata me obstruye.
IV
Que mal hice, no me explico,
Entregaba todo de mí,
Lo amaba en la cercanía y lejanía,
Vida mía.
Tu mirada clavada en la mía
Me destruye día a día.
V
Ahora estoy llorando de pena,
Y no puedo hacer nada
Me ahogo pensando en que falle,
Si el delito que cometí es que te amé.
VI
Cae la lluvia desde el cielo,
Y mi grito son los relámpagos,
Esperar la calma en mi corazón,
Y regrese el amor y la pasión.
VII
No contengo mi llanto cae a gran dolor.
Siento que se me derrumba todo a mis pies,
Y no puedo hacer nada, en lo absoluto,
Cae con peso bruto.
VIII
Estoy pensando en el ayer,
En los momentos lindos de pasión,
Eras tierna y cariñosa,
Bella como la rosa.
IX
Ahora donde está todo lo dicho,
Donde está tu amor que me jurabas,
Donde está, donde está,
Me dijiste que me amabas.
X
Yo creí en tus palabras,
Pero eran falsas, mentirosa,
Ilusionaste este querer,
La sonrisa me has hecho perder.
XI
Lo dejo en manos de dios,
Un bien con un mal se paga,
Y es así como me pagaste,
Nunca me amaste.
XII
Al cielo te lleve con mi amor,
Ahora él es testigo de mi sufrir,
Con la lluvia descarga su dolor,
Recordando tu olor.
XIII
Pero nunca es tarde,
Tropecé de nuevo y no me arrepiento,
Caminare con más cuidado,
Con la que está a mi lado.
XIV
Perdí un gran amigo,
Caí en tu juego,
Ahora no sabes cómo me arrepiento,
Y el dolor que por dentro siento.
XV
La vida te enseña y castiga también,
Yo soy el que camino mal,
Ahora este es mi castigo,
Por estar contigo.
XVI
Perdóname amigo del alma,
Me equivoque y acepto mi error,
El peor castigo merezco,
Por ser así de fresco.
XVII
Esa mujer no vale la pena,
Deja huella en donde choca,
Calcula sus movimientos,
Y destruye sentimientos.
XVIII
Para que seguir con el juego,
Ya termino en buen momento,
Gracias señor,
Por quitarme este verdugo que era mi fracaso y mi dolor.
Juan Ricardo Romero Junco
The Dreamer
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Poema publicado el 23 de Noviembre de 2010
Hoy es el día más triste de mi vida,
Esta triste y amarga,
Triste porque quiere de verdad,
Amarga por dolor de aquella falsedad.
I
La estrella que siempre miraba en las noches,
No fue una estrella sincera,
Dejo de brillar su esplendor,
Y en mí solo dejo dolor.
II
Yo era el sol,
Daba calor y vida,
Ella era mi espejo la luna,
Como ella ninguna.
III
Lo llegue a querer tanto, tanto,
Que me aferre a mal paso,
Paso a paso me destruye,
Me mata me obstruye.
IV
Que mal hice, no me explico,
Entregaba todo de mí,
Lo amaba en la cercanía y lejanía,
Vida mía.
Tu mirada clavada en la mía
Me destruye día a día.
V
Ahora estoy llorando de pena,
Y no puedo hacer nada
Me ahogo pensando en que falle,
Si el delito que cometí es que te amé.
VI
Cae la lluvia desde el cielo,
Y mi grito son los relámpagos,
Esperar la calma en mi corazón,
Y regrese el amor y la pasión.
VII
No contengo mi llanto cae a gran dolor.
Siento que se me derrumba todo a mis pies,
Y no puedo hacer nada, en lo absoluto,
Cae con peso bruto.
VIII
Estoy pensando en el ayer,
En los momentos lindos de pasión,
Eras tierna y cariñosa,
Bella como la rosa.
IX
Ahora donde está todo lo dicho,
Donde está tu amor que me jurabas,
Donde está, donde está,
Me dijiste que me amabas.
X
Yo creí en tus palabras,
Pero eran falsas, mentirosa,
Ilusionaste este querer,
La sonrisa me has hecho perder.
XI
Lo dejo en manos de dios,
Un bien con un mal se paga,
Y es así como me pagaste,
Nunca me amaste.
XII
Al cielo te lleve con mi amor,
Ahora él es testigo de mi sufrir,
Con la lluvia descarga su dolor,
Recordando tu olor.
XIII
Pero nunca es tarde,
Tropecé de nuevo y no me arrepiento,
Caminare con más cuidado,
Con la que está a mi lado.
XIV
Perdí un gran amigo,
Caí en tu juego,
Ahora no sabes cómo me arrepiento,
Y el dolor que por dentro siento.
XV
La vida te enseña y castiga también,
Yo soy el que camino mal,
Ahora este es mi castigo,
Por estar contigo.
XVI
Perdóname amigo del alma,
Me equivoque y acepto mi error,
El peor castigo merezco,
Por ser así de fresco.
XVII
Esa mujer no vale la pena,
Deja huella en donde choca,
Calcula sus movimientos,
Y destruye sentimientos.
XVIII
Para que seguir con el juego,
Ya termino en buen momento,
Gracias señor,
Por quitarme este verdugo que era mi fracaso y mi dolor.
Juan Ricardo Romero Junco
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