Escribe en la irritada luz...
Poema publicado el 24 de Septiembre de 2023
Escribe en la irritada luz,
y duro brilla el obstinado golpe
donde el grácil niño busca el tiempo en la mirada.
Por las horas ascendió la noche,
nació como en el muro trepa
fuerte la hiedra; en los límites
de su abandono viste sorda
la unión del cielo con la muerte,
las nubes que agitaban su alianza,
y entre el fruto del hallazgo está su mundo.
A medio encender,
como la espada quema
el hielo de la tarde, los poros
del frío del otoño, la vasta e innombrable
sequedad, recoges el beso
como néctar en la noche.
Mira la dulce brisa de los cuerpos,
su cierta pretensión, la pequeña
luz que invoca el aire.
Ahora como manto de las cosas
pulsas el tiempo novedoso
y abre el ser su fugaz gesto,
sus ojos en lo leve a la intemperie,
el ruido prolongado
ante las hondas cicatrices de su mar,
la boca naciente y el murmullo de la carne.
Y como tinta del poema
la sangre va por los costados,
en el río espera
la visible batalla del silencio,
la lenta opacidad donde ya encuentras
el desnudo tejido en la mirada.
(de "El vuelo y la mirada", La Isla de Siltolá, 2015)
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Poema publicado el 24 de Septiembre de 2023
Escribe en la irritada luz,
y duro brilla el obstinado golpe
donde el grácil niño busca el tiempo en la mirada.
Por las horas ascendió la noche,
nació como en el muro trepa
fuerte la hiedra; en los límites
de su abandono viste sorda
la unión del cielo con la muerte,
las nubes que agitaban su alianza,
y entre el fruto del hallazgo está su mundo.
A medio encender,
como la espada quema
el hielo de la tarde, los poros
del frío del otoño, la vasta e innombrable
sequedad, recoges el beso
como néctar en la noche.
Mira la dulce brisa de los cuerpos,
su cierta pretensión, la pequeña
luz que invoca el aire.
Ahora como manto de las cosas
pulsas el tiempo novedoso
y abre el ser su fugaz gesto,
sus ojos en lo leve a la intemperie,
el ruido prolongado
ante las hondas cicatrices de su mar,
la boca naciente y el murmullo de la carne.
Y como tinta del poema
la sangre va por los costados,
en el río espera
la visible batalla del silencio,
la lenta opacidad donde ya encuentras
el desnudo tejido en la mirada.
(de "El vuelo y la mirada", La Isla de Siltolá, 2015)
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