Hay tardes que se van...
Poema publicado el 24 de Septiembre de 2023
"teatro escrito por el viento y la luz"
......................... Octavio Paz
Hay tardes que se van
como un desierto.
La extensión en la ciudad de luz,
lo que ocupa este espacio
de música inocente. El viento deja
en los visible los lugares
oscuros, confiere la escondida
vocación de la mirada:
lo invisible es el aullido de las cosas,
la revelada profanación,
las sombras y los días
que se unen y vuelven en la sílaba secreta
como quien traza un mapa
entre las lenguas. El sol deja su luz
en el reverso de la piedra.
Conoces el camino
y te preguntas qué es la infancia ante este calor
tan insolente. La ciudad al fondo
vista desde el ventanal.
Los pájaros
que en las horas se destruyen
(guarida de la voz),
la limpia sábana del tiempo y su acogida
descendencia, el velo del poniente
y la nacida espera para el canto.
Como las líneas antiguas
de la tarde borrada, las palabras vuelven a su noche
y todo es una lenta afirmación
sobre el caudal del alma,
hay guitarras que suenan
en la calle, quien toca vende
su costumbre, y los oídos acarician
la destejida piel del aire,
el rumor que nace y te convoca,
las fuentes de las plazas
y el corazón siempre latiendo
como un profundo río interminable.
(de "Por la piel de las escalas", inédito, 2014)
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Poema publicado el 24 de Septiembre de 2023
"teatro escrito por el viento y la luz"
......................... Octavio Paz
Hay tardes que se van
como un desierto.
La extensión en la ciudad de luz,
lo que ocupa este espacio
de música inocente. El viento deja
en los visible los lugares
oscuros, confiere la escondida
vocación de la mirada:
lo invisible es el aullido de las cosas,
la revelada profanación,
las sombras y los días
que se unen y vuelven en la sílaba secreta
como quien traza un mapa
entre las lenguas. El sol deja su luz
en el reverso de la piedra.
Conoces el camino
y te preguntas qué es la infancia ante este calor
tan insolente. La ciudad al fondo
vista desde el ventanal.
Los pájaros
que en las horas se destruyen
(guarida de la voz),
la limpia sábana del tiempo y su acogida
descendencia, el velo del poniente
y la nacida espera para el canto.
Como las líneas antiguas
de la tarde borrada, las palabras vuelven a su noche
y todo es una lenta afirmación
sobre el caudal del alma,
hay guitarras que suenan
en la calle, quien toca vende
su costumbre, y los oídos acarician
la destejida piel del aire,
el rumor que nace y te convoca,
las fuentes de las plazas
y el corazón siempre latiendo
como un profundo río interminable.
(de "Por la piel de las escalas", inédito, 2014)
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