Poema 7 / libra
Poema publicado el 14 de Diciembre de 2010
No tendrás otro Dios delante de mí.
Deuteronomio 5,7
Ángel de mis sueños
Maravilla celestial
Figura ambicionada
Imagen magistral
Yo siempre pedía
Ciegamente en mí rezar
Acogieras mi deseo
De verte despertar
Sediento por tenerte
Amarte hasta el final.
Ahora sé que duermes
Desvelo no tendrás
Sueñas que te quiero
Fervorosa amarás
Excitante está tu mente
Palpita sin cesar
Te miro de repente
Lo hago sin parar
Te beso dulcemente
Amada tú serás.
Vibrante sustancia
Vehemente clamará
Exigente, insistente,
Dulce llamará,
Meditas ardiente
Sueñas bondad
Dormida tú me piensas
Emocionada me hallarás
Dócil son tus sueños
Manso el despertar.
Ángel de mi guarda
Escolta divida
Abrazante de mi cuerpo
Siempre le cuidas
Dulces mis sueños
Tú me los guardas
Quimera queriente
Ella me ama
Cerca sus brazos
Siempre me abrazan.
La noche es tranquila
Tu sueño está en calma
Suspiras durmiente
Anhelante proclamas
Ilusiones queridas
Te brotan del alma
Quererme por siempre
Amarme sin traba
Sueñas impaciente
Tu amor me reclama.
Ahora despiertas
Consciente me admiras
Meditas tu sueño
Cavilas perdida
Tu pecho se agita
Te miras, suspiras
Tus ojos se empañan
Sabientes que aman
Divisan inquietos
Contemplan el alba.
Tu alma exigente
Percibe tú daño
Ayudarte por siempre
Solo sin engaños
Sensible, protectora
Esencia y rectora
Sentirte apacible
Sin nunca mentirte
Lúcida, piadosa
Impávida y hermosa.
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Poema publicado el 14 de Diciembre de 2010
No tendrás otro Dios delante de mí.
Deuteronomio 5,7
Ángel de mis sueños
Maravilla celestial
Figura ambicionada
Imagen magistral
Yo siempre pedía
Ciegamente en mí rezar
Acogieras mi deseo
De verte despertar
Sediento por tenerte
Amarte hasta el final.
Ahora sé que duermes
Desvelo no tendrás
Sueñas que te quiero
Fervorosa amarás
Excitante está tu mente
Palpita sin cesar
Te miro de repente
Lo hago sin parar
Te beso dulcemente
Amada tú serás.
Vibrante sustancia
Vehemente clamará
Exigente, insistente,
Dulce llamará,
Meditas ardiente
Sueñas bondad
Dormida tú me piensas
Emocionada me hallarás
Dócil son tus sueños
Manso el despertar.
Ángel de mi guarda
Escolta divida
Abrazante de mi cuerpo
Siempre le cuidas
Dulces mis sueños
Tú me los guardas
Quimera queriente
Ella me ama
Cerca sus brazos
Siempre me abrazan.
La noche es tranquila
Tu sueño está en calma
Suspiras durmiente
Anhelante proclamas
Ilusiones queridas
Te brotan del alma
Quererme por siempre
Amarme sin traba
Sueñas impaciente
Tu amor me reclama.
Ahora despiertas
Consciente me admiras
Meditas tu sueño
Cavilas perdida
Tu pecho se agita
Te miras, suspiras
Tus ojos se empañan
Sabientes que aman
Divisan inquietos
Contemplan el alba.
Tu alma exigente
Percibe tú daño
Ayudarte por siempre
Solo sin engaños
Sensible, protectora
Esencia y rectora
Sentirte apacible
Sin nunca mentirte
Lúcida, piadosa
Impávida y hermosa.
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