Ya no quedan mujeres como las de antes.
Poema publicado el 02 de Abril de 2012
A mi madre.
En el hogar de la vida de antaño,
en el país de los años cincuenta
la igualdad es la dieta que alimenta,
hombres y mujeres, año tras año.
Sobrevivir, es el agua del caño
que refresca una tierra polvorienta,
la mujer, nunca ha perdido la cuenta
de las senaras que alberga en su paño,
las fatigas que luce su belleza,
de las espigas crecidas en su alma,
de los silencios que rugen olvido,
de una vida sembrada en la proeza.
Cuando los tiempos recobren la calma,
lamentarán siempre lo que han perdido.
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Poema publicado el 02 de Abril de 2012
A mi madre.
En el hogar de la vida de antaño,
en el país de los años cincuenta
la igualdad es la dieta que alimenta,
hombres y mujeres, año tras año.
Sobrevivir, es el agua del caño
que refresca una tierra polvorienta,
la mujer, nunca ha perdido la cuenta
de las senaras que alberga en su paño,
las fatigas que luce su belleza,
de las espigas crecidas en su alma,
de los silencios que rugen olvido,
de una vida sembrada en la proeza.
Cuando los tiempos recobren la calma,
lamentarán siempre lo que han perdido.
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