Mi único deseo (liberación de mi alma)
Poema publicado el 02 de Agosto de 2012
Mi único deseo es permanecer sin ser pisoteado,
Arrancar de mi alma el dolor de mi corazón cansado,
Retener la esperanza hasta el momento de la templanza,
Liberar todos mis demonios para así encontrar más fe y poder dar buen testimonio,
De todo lo que pude vencer en este estado de incertidumbre y miedo al entorno.
Mi único deseo es no sucumbir ante la amenaza de muerte
De este ente tenebroso llamado mundo decente.
Mi único deseo es encontrar en el corazón consuelo y valor
En esta apremiante y preocupante situación; que si no que sería de mí y sin una resolución,
Llegaría a la resignación.
Encontrare en la calma la techumbre de mi aposento,
Me confortaré con la almohada de un sentimiento,
Me mudare de esperanza para mantenerme contento,
Y no me conformare a perderme entre cientos y cientos.
Mi único deseo es no morir sin contento y cantar al viento lo bien que me siento.
Cuando me vaya no me quiero ir sino continuar y resistir manteniéndome firme en mi voluntad de vivir y amar.
Mi único deseo es corresponder al buen amigo que siempre fue sincero conmigo,
Y regresarle el favor como premio en su honor, para así continuar mi aventura en primavera de miles de sueños de mi alma buena,gratificando el recuerdo de mis buenos momentos, para así, regresar a ser sustento de todos mis amigos del sendero, que algún día me acompañaran en el cielo.
Mi único deseo es no morir sin decir tantas veces a los seres que amo “te quiero”, porque sé que así se va construyendo el cielo; sobre todo, para el alma necesitada de consuelo.
Mi único deseo es no perderme a mí mismo y retener todo lo que quiero; sobre todo, en este tiempo que me roba el aire puro de la eternidad, de la apasionante aventura de la sensación de la perpetuidad.
Mi único deseo es que la verdad de todo lo que me afecta se sepa y los disfraces de la falsedad no sean anestesia para la conciencia por la que perdemos la paciencia.
Que el mundo se equilibre con el poder de mi sapiencia, en la consideración y en la vivencia.
Mi único deseo, es liberar mi alma de tanto descontento y poder gritar al viento, lo bien que me siento.
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Poema publicado el 02 de Agosto de 2012
Mi único deseo es permanecer sin ser pisoteado,
Arrancar de mi alma el dolor de mi corazón cansado,
Retener la esperanza hasta el momento de la templanza,
Liberar todos mis demonios para así encontrar más fe y poder dar buen testimonio,
De todo lo que pude vencer en este estado de incertidumbre y miedo al entorno.
Mi único deseo es no sucumbir ante la amenaza de muerte
De este ente tenebroso llamado mundo decente.
Mi único deseo es encontrar en el corazón consuelo y valor
En esta apremiante y preocupante situación; que si no que sería de mí y sin una resolución,
Llegaría a la resignación.
Encontrare en la calma la techumbre de mi aposento,
Me confortaré con la almohada de un sentimiento,
Me mudare de esperanza para mantenerme contento,
Y no me conformare a perderme entre cientos y cientos.
Mi único deseo es no morir sin contento y cantar al viento lo bien que me siento.
Cuando me vaya no me quiero ir sino continuar y resistir manteniéndome firme en mi voluntad de vivir y amar.
Mi único deseo es corresponder al buen amigo que siempre fue sincero conmigo,
Y regresarle el favor como premio en su honor, para así continuar mi aventura en primavera de miles de sueños de mi alma buena,gratificando el recuerdo de mis buenos momentos, para así, regresar a ser sustento de todos mis amigos del sendero, que algún día me acompañaran en el cielo.
Mi único deseo es no morir sin decir tantas veces a los seres que amo “te quiero”, porque sé que así se va construyendo el cielo; sobre todo, para el alma necesitada de consuelo.
Mi único deseo es no perderme a mí mismo y retener todo lo que quiero; sobre todo, en este tiempo que me roba el aire puro de la eternidad, de la apasionante aventura de la sensación de la perpetuidad.
Mi único deseo es que la verdad de todo lo que me afecta se sepa y los disfraces de la falsedad no sean anestesia para la conciencia por la que perdemos la paciencia.
Que el mundo se equilibre con el poder de mi sapiencia, en la consideración y en la vivencia.
Mi único deseo, es liberar mi alma de tanto descontento y poder gritar al viento, lo bien que me siento.
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